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Un orzuelo interno en el ojo no es más una inflamación que se produce en el párpado a causa de una infección en las glándulas sebáceas de las pestañas. Podemos detectarlo sobre todo por su forma tan característica, como un grano redondo de consistencia más bien sólida en el interior del párpado o saliendo hacia la zona exterior, también acompañado de dolor, hinchazón en todo el ojo y enrojecimiento.
Este tipo de infección es muy común en niños, ya que se produce debido a una mala higiene, entrando en contacto las bacterias que la provocan de forma directa con el ojo. Vamos a ver cómo podemos detectar este tipo de infecciones en niños, y sobre todo cómo curarla en el menor tiempo posible aliviando los síntomas para que no duela al niño.
Orzuelo interno en el ojo; ¿por qué salen los orzuelos?
Es más que suficiente que un niño se toque el ojo con las manos sucias, para que las bacterias estafilococos entren en contacto con la mucosa del párpado, causando un orzuelo interno en el ojo.
Éste suele producirse en el borde del párpado, a la altura de las pestañas, un orzuelo en el párpado inferior, o directamente en el interior del párpado, dónde sólo podremos apreciar la hinchazón y el enrojecimiento. En este caso, para detectarlo hay que levantar el párpado y buscar el granito blanquecino que queda en el interior para saber que se trata de un orzuelo.
Un orzuelo interno en el ojo suele remitir por sí mismo en unos 2-4 días, aunque en niños más pequeños y algunos adultos, la infección puede durar algo más de tiempo. La infección sale sola en forma de pus, bajando la inflamación y eliminándose por completo.
Sin embargo, si queremos aplicar un tratamiento para hacer que la infección dure menos tiempo, siempre podemos ayudarnos de algunos remedios caseros que pueden funcionar.
Aplicando compresas tibias sobre el ojo afectado, además de aliviar el dolor y la inflamación, eliminamos el pus mucho más rápido. En niños es conveniente repetir este proceso 4 veces al día, aplicando un paño caliente durante 10 minutos.
Es muy importante que las toallas que usemos para aplicar calor las lavemos bien en agua caliente después de su uso, ya que podríamos pasar las bacterias de una persona a otra sin que nos demos cuenta. También al tratar una infección en niños, debemos lavarnos las manos en todo momento, para asegurarnos de no transmitir las bacterias de un lado a otro.
En caso de que la infección no remita, podemos acudir al médico o pediatra para aplicar un tratamiento adecuado. Nunca debemos dar antibióticos a un niño sin que un médico nos los recete para este tratamiento expresamente, ni tampoco tratar de eliminar nosotros mismos los granitos del interior del ojo, ya que podríamos hacer mucho daño en el ojo, con graves consecuencias de por vida.
Eliminar un orzuelo interno en el ojo es más fácil de lo que parece, y aunque lo normal es que este tipo de infección vuelva a aparecer en niños, hay que tener paciencia y darle un tratamiento adecuado en todo momento para no dejar secuelas en el ojo del pequeño.
