¿Cómo podemos ayudar los papás a un niño con encopresis que no es capaz de retener las heces? Este es un problema bastante frecuente, y sin embargo no se suele hablar de forma abierta. Pero por suerte, tiene solución, y es posible actuar obteniendo resultados altamente positivos.
Hay niños que no tienen la capacidad de retener las heces y suelen manchar su ropa interior sin darse cuenta. Conocido como encopresis, o incontinencia fecal, suele ser motivo de vergüenza o incluso de trauma durante la infancia.
No es de extrañar, ya que este problema puede darse tanto en casa como fuera de ella. Hay niños que se hacen caca mientras duermen, mientras están viendo la televisión, pero a otros les ocurre directamente en la escuela o jugando con sus amiguitos.
A través de esta completa guía para padres, analizamos qué es la encopresis, cuáles son sus causas, síntomas y tratamiento. Descubre cómo actuar ante un niño con encopresis, y cómo acabar con el problema de una manera efectiva.
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¿Qué es la encopresis?
La encopresis, también conocida como incontinencia fecal o incontinencia por desbordamiento, es un problema que suele afectar a niños que realizan la evacuación involuntaria de manera repetida. Este ocurre cuando no hay ningún otro trastorno nervioso u orgánico, produciéndose la incontinencia tanto por el día como por la noche, sin que el pequeño tenga control consciente.
De manera general, la encopresis infantil se debe a la retención de heces en el colon y el recto, provocando un estreñimiento importante. Las heces fecales se endurecen, mientras que las heces líquidas se filtran a través de los huecos que dejan estas, manchando la ropa interior.
No es que el niño no pueda aguantarse la caca. Un niño con encopresis ya ha aprendido a ir al baño, ya que es habitual que aparezca a partir de los 4 o 5 años. Por lo general, es un síntoma agravado de estreñimiento prolongado, que podría seguir empeorando si no se trata el problema de base.
Por supuesto, hacerse caca encima es muy traumático para el pequeño, y frustrante para los padres. Es necesario actuar para encontrar la causa y resolverla lo antes posible.
Síntomas en un niño con encopresis
¿Cómo puedo reconocer si mi hijo padece de encopresis o si simplemente aún no sabe aguantar la caca? Como ya hemos avanzando, este trastorno suele aparecer a partir de los 4 años, lo que ya nos daría una ligera idea de si el sistema digestivo y excretor del niño ya se ha desarrollado correctamente o no.
Además, hay una serie de características que suelen acompañar a la incontinencia por desbordamiento, que nos ayudan a los papás en su detección. Fíjate en estas señales:
- Más de 1 episodio de incontinencia fecal al mes, durante al menos los 3 últimos meses.
- El niño tiene más de 5 años, y ya es capaz de controlar los esfínteres la mayor parte del tiempo.
- Incapacidad para retener las heces justo cuando llega al baño. Siente que se hace caca pero no le da tiempo a sentarse en el inodoro cuando ya ha manchado la ropa interior.
- Suele defecarse en la ropa con frecuencia, o lo hace en lugares inapropiados porque no logra aguantarse.
- Las heces suelen ser líquidas o de consistencia fluida en su mayoría.
- Tiene problemas para ir al baño la mayor parte del tiempo, con heces duras típicas de estreñimiento.
- Expulsión de heces de gran tamaño cuando por fin consigue defecar correctamente.
- Periodos largos entre deposiciones.
- Dolor abdominal y falta de apetito.
- Mantiene en secreto su problema, sin contar a los mayores que se ha manchado sin querer.
- Infecciones urinarias recurrentes, sobre todo en niñas, por la acumulación de heces en la ropa interior.
En muchos casos encontramos que encopresis y enuresis van de la mano. Es decir, el pequeño no solo tiene problemas para controlar la caca, si no que también puede orinarse encima, sobre todo por la noche mientras duerme. Esto se conoce como enuresis nocturna.
Causas de la incontinencia fecal en niños
La encopresis es un trastorno que está relacionado estrechamente con el estreñimiento crónico en niños y jóvenes. Sin embargo, no es la única causa. En los últimos años se ha visto que los problemas emocionales también podría provocar esta fuga de caca incontrolada en niños, en cuyo caso, el tratamiento a seguir sería diferente.
Estreñimiento infantil
El estreñimiento es un problema bastante común en niños pequeños. Cuando su sistema digestivo no está del todo desarrollado, y sobre todo debido a una mala alimentación y a una hidratación deficiente, el pequeño tenderá a presentar unas heces duras y secas, cuya evacuación es complicada y dolorosa.
Los niños con estreñimiento tienen dificultades para ir al baño, y también temen ese momento. Por ello, muchos peques evitan hacer caca, y el problema se intensifica. Esto hace que el colon se estire por acumulación de las heces, favoreciendo que con el tiempo las heces más blandas se escapen.
La encopresis infantil es más habitual en niños que retienen las heces por no querer ir al baño, así como cuando no quieren interrumpir el juego para hacer caca y se la aguantan. Por este motivo, la encopresis y TDAH podrían estar relacionadas de alguna manera.
También ocurre por falta de fibra en la dieta del niño, por un exceso en el consumo de leche de vaca y lácteos, y por supuesto, por no beber suficiente agua, agravando el estreñimiento.
Encopresis emocional
Mi hija se hace caca encima, pero no tiene problemas de estreñimiento. ¿Qué puede pasarle? Hay veces que los niños presentan ansiedad y ganas de defecar, pero cuando llega el momento de hacerlo en el retrete no les sale.
Por supuesto, el estrés emocional afecta al sistema digestivo de los niños, causando esas pérdidas de caca en los momentos más inoportunos. Es más común que se dé por la noche, de manera similar a las pérdidas de orina en niños.
¿Y por qué se produce la encopresis emocional? Pues los motivos son diferentes en cada niño o niña. Desde cambios que se hayan dado en su vida, una mudanza, el divorcio de sus padres, la pérdida de algún familia, abusos por parte de un adulto, bullying infantil, y otros.
En los niños más pequeños, cuando no han aprendido correctamente el proceso de ir al baño, o si han llevado mal el momento de dejar el pañal, pueden tener ‘regresiones’ que no les permitan avanzar en su desarrollo.
¿Qué consecuencias negativas puede sufrir un niño con encopresis?
Imagínate cómo te sentirías tú si tuvieras problemas para retener las heces y sueles hacerte caca encima. De la misma manera, o incluso peor, puede afectarle a un niño con encopresis, que no entiende qué le está pasando ni sabe cómo ponerle solución.
Como hemos mencionado, muchos niños lo llevan en silencio, hasta el punto que los padres o los profesores apenas se dan cuenta de la verdadera magnitud del problema. Puede parecer que tan solo manchan un poquito la ropa, cuando por dentro se sienten culpables y avergonzados, llegando al límite de la inseguridad a la hora de salir de casa.
Los niños con encopresis corren el riesgo de sufrir un aislamiento social, ya sea autoimpuesto, o porque otros niños a su alrededor le rechacen. Algunos se niegan a ir a la escuela, o no se relacionan con los demás, por el miedo a que se rían por sus pérdidas de heces y todo lo que ello conlleva.
En casa, los padres no sabemos cómo actuar correctamente, y hay quien culpa a los peques por no saber controlar la caca. Yo misma debo saber que si mi hijo se hace caca encima no es porque quiera. Y si le regaño, lo único que consigo es hacerle sentir peor, y dañar su autoestima de manera fulminante. ¡Ese no es el camino a seguir!
Tratamiento de la incontinencia fecal en niños
Si sospechas que tu hijo podría tener encopresis, no dudes en acudir al pediatra para hacer una valoración y emitir un diagnóstico. Cuando más precoz sea la detección del problema, más fácil será su prevención y tratamiento.
El doctor realizará una exploración física, acompañada a veces de tacto rectal para la detección de heces retenidas en el colon. La exploración se acompaña de una radiografía o ecografía para descartar otros problemas físicos, así como de una evaluación psicológica en caso de sospecha de encopresis emocional.
Para la eliminación de las heces retenidas en niños, lo más útil es un tratamiento con laxantes a través de supositorios o enemas. Tras la primera intervención, los papás deberán hacer un seguimiento para controlar la evolución, evitando que la caca vuelva a quedarse atrapada en el intestino.
Los niños que tienen tendencia a padecer este problema verán una gran mejoría con una estimulación regular de la actividad intestinal. Tomar más fibra, alimentos de origen vegetal, beber más agua, evitar la leche de vaca durante un periodo de tiempo, y por supuesto, controlar la tensión y la ansiedad, son otros tips básicos en el tratamiento para un niño con encopresis.
La manera más adecuada de ayudar a una niña o un niño con encopresis es brindarle la atención y los cuidados necesarios para que no complique el problema. La prevención es clave, consiguiendo que el hábito de ir al baño sea lo más natural posible para los pequeños en esta etapa de aprendizaje.
Muy buenos consejos! Desconociamos este problema..
Gracias!
Besos!
A. Morneo