A la hora de decorar una habitación para un bebé recién nacido, no debemos tomarnos los detalles a la ligera, porque cada elemento que escojamos nos puede ser muy útil o quizás suponer un estorbo cuando llegue el gran día de que nuestro bebé estrene su nuevo espacio en casa.
Vamos a ver qué aspectos tener en cuenta para decorar la habitación de tu bebé de forma mucho más práctica, cuáles son los imprescindibles para el primer día, y en qué momento debemos tenerlo todo preparado antes del día del parto, porque en los últimos meses las prisas no son buenas. ¡Así que toma nota!
Decorar una habitación para un bebé recién nacido
En primer lugar, para decorar una habitación para un bebé, debemos escoger una temática que sea armoniosa y relajante para el bebé. Queremos que el recién nacido se sienta cómodo en su espacio desde el primer día, y que todos los elementos que lo rodeen influyan en su educación y su descanso de manera positiva, nunca en su estrés.
Es importante que pintemos la habitación con mucho tiempo de antelación, en el caso de que queramos darle un color determinado, ya que antes de que llegue el bebé tendrá que estar bien ventilada para que el olor a pintura no sea molesto. No importa el color de las paredes que escojamos, pero siempre es preferible que para un bebé recién nacido sean colores claros, mucho más relajantes para él.
Un aspecto muy importante a la hora de decorar la habitación de un bebé recién nacido es escoger sólo los muebles que sean necesarios para sus primeros meses de vida, y que además sean prácticos y de calidad, de forma que podamos seguir usándolos a medida que el niño crezca.
Vamos a necesitar como mínimo una cuna, un sillón para estar con el niño, acunarlo para que se duerma y alimentarlo, una cajonera que además nos sirva para colocar cosas encima, un cambiador-bañerita, y por supuesto un buen armario dónde guardar toda su ropa. Además podemos recurrir a elementos de almacenajes como baúles y más cajoneras, que nos vendrá muy bien para guardar los juguetes y mantener orden cuando el niño vaya creciendo.
Escoge muebles que sean neutros para decorar la habitación de un bebé, con motivos no demasiado infantiles, porque así podremos seguir usándolos cuando el niño sea mayor. Si queremos conseguir un punto más infantil, siempre podemos decorarlos con vinilos de quita y pon con dibujos bonitos, o láminas infantiles que podremos quitar cuando nos aburramos de ellos.
En cuanto al resto de elementos decorativos, ya será cuestión de gustos personales. Podemos añadir algún cuadro en las paredes, siempre que esté colgado bien seguro, o algún objeto de decoración infantil que no nos estorbe. Piensa que a la hora de limpiar, cuantos menos trastos tengas en la habitación, mucho más fácil, ya que además la habitación del bebé debemos mantenerla siempre muy limpia.
Si quieres darle motivos decorativos más concretos, espera a que el bebé se haga mayor, y que él mismo ayude a sus papás a escoger sus elementos favoritos (peluches, libros, juguetes…), decorar una habitación para un bebé tiene que ser algo más personal para el niño, ya que siempre influirá en su educación emocional.