Uno de los momentos más divertidos del verano para los niños es cuando pueden compartir momentos con sus amiguitos, celebrando una fiesta de pijamas o disfrutando durante unos días de campamento con todos ellos. Pero muchos niños no consiguen participar de este tipo de actividades por el miedo a dormir fuera de casa; un miedo que puede ocurrir con más frecuencia de la que esperamos los papás, aunque no es difícil de superar si tenemos las herramientas educativas necesarias.
Si a tu peque le da miedo quedarse a dormir fuera de casa, sigue estas pautas para ayudarle a superarlo de forma definitiva, y así poder disfrutar de esos momentos divertidos que todo niño debe tener en sus vacaciones de verano.
Miedo a dormir fuera de casa; cómo ayudar a nuestros hijos
Hay niños que no tienen ningún problema para pasar una noche fuera de casa sin sus papás, pero hay otros que sufren un terrible miedo a dormir fuera de casa. Se ponen nerviosos, con dolor de estómago, sudoración, naúseas y dolor de cabeza sólo con pensar que tienen que darse a dormir en casa de un amigo o en un campamento de verano sin la compañía de sus padres.
Este tipo de problema en niños es más frecuente de lo que podemos llegar a pensar, y los niños lo pasan realmente mal, ya que quedarse a dormir fuera es algo muy habitual que todos tenemos que superar alguna vez en la vida.
Un niño a partir de los 6 u 8 años debe comenzar a afrontar la dura tarea de quedarse a dormir sin sus papás, y si realmente tienen miedo, no está mal que le ayudemos a superarlo cuanto antes para que no muestre otro tipo de problemas en el futuro. Para ello, sigue estas pautas:
– Siéntate a hablar tranquilamente con tu peque y haz que exprese su miedo a dormir fuera de casa y todas las preguntas e inquietudes que tenga. Respóndele a cada una de ellas, para que vea que no hay ningún problema y que estará en todo momento a salvo aunque no están sus papás con él.
– Explícale todas las actividades divertidas que va a hacer en casa de su amiguito o en el campamento, y así se motivará para que el deseo de pasarlo bien sea más fuerte que su miedo a estar fuera.
– Haz todos los preparativos con él, la maleta con su ropa, sus juguetes favoritos que quiera llevarse, y hazlo partícipe en todo momento.
– Ante todo, no intentes evitar la situación, cuanto antes consiga tu hijo afrontar sus miedo, será mucho más fácil para ambos.
– Mantén la calma y la paciencia si a tu hijo le cuesta más tiempo dominar la situación; sobre todo no le grites ni utilices palabra duras, ya que sólo conseguirás aumentar su miedo.
– No recurras al consuelo en exceso diciéndole todo el rato que estará bien y que no le pasará nada, ya que el niño tenderá a desconfiar de las palabras de sus papás.
Ayuda a tu hijo a superar su miedo a dormir fuera de casa, y juntos podréis disfrutar de un verano mucho más divertido y tranquilo. ¡Verás como no es tan difícil!