A pesar de que parezca que los niños de hoy en día han sucumbido a las nuevas tecnologías, y que llevan un estilo de vida preferentemente sedentario, los juegos tradicionales siguen llamando la atención de todos, y no hay peque que se resista a salir a jugar con su familia y amigos de la forma más sencilla, pero también la más divertida.
Los juegos para niños a los que solíamos jugar nosotros cuando éramos pequeños suponían salir más a la calle, correr, saltar, y emocionarnos como si nos fuera la vida en ello. También hay juegos populares más tranquilos, ideales para hacer en casa en un día lluvioso, en los que pueden participar todos los miembros de la familia, incluso los más mayores. Pero si hay algo que tienen en común todo ellos, es que no necesitas apenas materiales para jugar horas y horas sin aburrirte.
Hemos hecho una recopilación de los juegos de niños clásicos de toda la vida, a los que seguramente tú también habrás jugado de niño, y que puedes enseñar también a tus hijos porque les van a encantar. Animaros con estos juegos tradicionales para niños para pasar las vacaciones, y los fines de semana más divertidos todos juntos, dejando volar la imaginación y moviéndoos como todos los pequeños deben hacer a lo largo de su infancia.
¡Toma nota de todos estos juegos tradicionales!
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Juegos tradicionales para niños de todas las edades
El escondite
Es uno de los juegos tradicionales que nunca pasa de moda por mucho que pase el tiempo y cambien las nuevas generaciones. Pueden jugar grandes y pequeños, y adaptar los niveles a diferentes edades, jugando tanto en el interior de casa, como en el exterior, para pasar horas y horas sin que decaiga la diversión.
Si aún no conoces la mecánica de este juego, es muy fácil. Uno de los participantes se la queda, y tiene que contar hasta 50 tapándose los ojos, mientras que los demás participantes se esconden. Una vez que llegue a 50, grita para que todos le escuchen: ‘¡Ya voy! ¡Quien no se haya escondido, tiempo ha tenido!’, y tiene que ir buscando a los demás uno por uno.
Para pillar a los otros participantes, cuando vea a alguien tiene que volver al lugar de inicio dónde estaba contando, y gritar: ‘¡Por María! ¡Te he encontrado!’. La primera persona a la que encuentre será quién le toque contar y buscar la próxima vez, pero si quién estaba buscando no consigue encontrar al resto de participantes, o si alguno de ellos puede llegar al lugar de inicio antes que el buscador y decir: ‘Por mi y por todos mis compañeros’, tendrá que volver a quedársela de nuevo.
Hay que correr y ser el más rápido para poder salvarse si no quieres quedártela para ser el buscador.
Chapas
Entre los juegos para niños y niñas que entraña emoción pero que no necesitamos salir de casa para jugarlo, están las chapas. Hay muchas formas de jugar con ellas, pero quizás la más tradicional es jugar haciendo circuitos.
Solo hay que pintar en el suelo el circuito por el que tenemos que ir moviendo las chapas dándole con la uña. Hay que ser preciso con el golpe para no salirse del circuito, porque si lo haces, tienes que empezar de nuevo. Pero si chocas con otro participante y sacas su chapa, será él quién tenga que empezar de nuevo.
Carreras de sacos
Otro de los juegos de pequeños que nunca puede faltar en un día al aire libre, con el que hacer mucho ejercicio sin que los niños se den cuenta.
Solo hay que conseguir un saco para cada participante, meter las piernas dentro, sujetarlo por el borde con las manos, y hacer una carrera para ver quién llega primero a la línea de meta. Pero saltar dentro de un saco no es nada fácil, y seguramente más de uno acabará por caer al suelo, y tendrá que levantarse rápido para coger a los demás y luchar para ser el ganador.
Escondite inglés
Este era quizás mi favorito entre todos los juegos tradicionales y populares. Tampoco se necesita materiales para jugar, y pueden participar niños de todas las edades y adultos.
Para jugar, el niño que la lleva debe ponerse de cara a una pared, quedando el resto de participantes a sus espaldas. Los participantes comienzan en la línea de salida, y tienen que ir poco a poco moviéndose para llegar a la pared y tocarla el primero. El niño que está contra la pared recita rápidamente: ‘Un, dos, tres, escondite inglés’, y se da la vuelta para pillar al resto.
Los demás tienen que quedarse como estatuas, totalmente quietos cuando se da la vuelta, porque si le pillan moviéndose, tiene que volver a la línea de salida y empezar de nuevo. Hay que jugar bien para poder llegar a la meta y tocar la pared el primero sin que te pillen moviéndote.
Las sillas
Entre los juegos populares para niños, nunca debe faltar en una fiesta infantil el juego de las sillas. Hacen falta sillas, una por cada participante, y un reproductor de música.
Se colocan todas las sillas en círculo, con el asiente hacia fuera, y se quita una silla para que haya un participante que no pueda sentarse. Cuando empieza la música, todos los niños comienzan a dar vueltas y bailar alrededor de las sillas.
Al parar la música sin previo aviso, todos tienen que ocupar una silla rápidamente. Habrá alguien que no pueda sentarse, y será eliminado, así como una de las sillas que se quitará para pasar a la siguiente ronda e ir eliminando niños hasta que solo quede una silla que será ocupada por el ganador.
Adivina quién soy
Pasando de los juegos de calle a un juego de interior para los días de lluvia o cuando no nos apetece salir de casa, este es de lo más entretenido.
Un adulto se encarga de hacer tarjetas con una palabra escrita en cada una. Cada participante cogerá una tarjeta, y se la pondrá en la frente para que todos menos él, vean lo que pone. Para adivinar quién es según lo que pone en su tarjeta, tiene que ir por turnos haciendo preguntas.
Por ejemplo, puede preguntar: ¿Vivo en el mar?, ¿soy de color amarillo?, ¿estoy frío?, ¿tengo manos?
En las tarjetas podemos incluir personajes, objetos, y todo lo que se nos ocurra, teniendo en cuenta la edad y las capacidades de los niños que están jugando para hacerlo fácil.
El pañuelo
El juego infantil del pañuelo también precisa que los niños corran y se muevan rápido. Hay que hacer dos equipos, y en cada uno, los participantes tendrán un número. Una persona se coloca en el centro, sujetando el pañuelo, y anuncia el número del participante que tiene que correr hacia él y coger el pañuelo.
Pero no es tan fácil como coger el pañuelo sin más, porque la otra persona que no coja el pañuelo, tendrá que correr para pillar al otro participante antes de que llegue a dónde está su equipo. Si le pilla, pierde, y gana el equipo que ha pillado al otro. Pero si quién tiene el pañuelo llega con su equipo, será el ganador.
Así repitiendo las veces que sean necesarias y sumar tantos puntos como se vea conveniente para declarar ganador a un equipo u otro.
Gallinita ciega
Otro de los juegos tradicionales antiguos a los que todos hemos jugado, es la gallinita ciega. Solo necesitamos un pañuelo para tapar los ojos a quién se la quede como gallinita.
Una vez que la gallinita tiene los ojos tapados, hay que darle 3 vueltas mientras se recita: ‘Gallinita ciega, ¿qué se te ha perdido? Una aguja en un pajar. Pues da 3 vueltas y la encontrarás.’
La gallinita tendrá que pillar a alguien a su alrededor, mientras los demás participantes se acercan a ella sin dejar que les pille. Cuando tenga a alguien, podrá tocarle a ciega para adivinar de quién se trata, y si lo hace, se la quedará esa persona como la siguiente gallinita.
La rayuela
La rayuela es otros de los juegos divertidos para niños que hacen que los peques se muevan. Consiste en pintar una rayuela en el suelo, compuesta por varios cuadros con números en su interior.
Desde el comienzo, se van numerando los cuadros del 1 al 10, siendo la casilla número 10 el final. Los niños tendrá que ir saltando a la pata coja sobre cada casilla para ir completando el tablero.
Se empieza lanzando una piedra sobre la casilla uno. En la casilla en la que esté la piedra no se puede saltar, y hay que pasarla por encima para saltar en la siguiente y en el resto. Una vez completado el número uno, se va a por el dos, el tres, y el resto de números hasta hacer todos los recorridos sin pisar la casilla en la que esté la piedra.
Si algún participante pisa dónde no debe, o pierde el equilibrio a la pata coja mientras salta, o si al lanzar la piedra no cae en la casilla que toca, pierde el turno y pasa al siguiente. El primero que consiga completar todo el recorrido y que su piedra pase por todos los números, es el que ganador.
Palmas
Cantar una canción acompañados de palmadas con tu compañero. Es el juego preferido de todas las niñas, aunque también lo juegan muchos niños en todas partes.
Es un juego que potencia la memoria, no solo por aprenderse la canción, sino también la coreografía que tiene cada una, y que la tienes que seguir para coincidir con tu compañero y hacerlo perfecto. Hay muchas canciones diferentes, como esta que puedes encontrar en Youtube:
Con todas estas ideas de juegos tradicionales, seguro que tenéis muchas horas de diversión en familia para disfrutar con vuestros hijos. ¿Cuál es vuestro favorito?
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