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Aunque aún no existen evidencias científicas que lo confirmen por completo, se cree que la hiperprolactinemia, o la sobre producción de la hormona prolactina, podría ser una de las principales causas de la infertilidad en mujeres jóvenes, así como también causante de la aparición de abortos espontáneos que se producen antes de la semana 12 de gestación.
En muchos casos, el control de la producción de prolactina puede ayudar a evitar estos problemas de concepción en la mujer. Cada vez los tratamientos médicos para este problema están más desarrollados, y tienen cada vez un uso más frecuente en problemas de fertilidad de la mujer.
¿Pero cómo afecta la prolactina alta al embarazo? ¿Cómo actúa exactamente esta hormona? ¿Y cuál es el tratamiento que podemos seguir si padecemos una hiperprolactinemia? Vamos a ver todos esos detalles, así que sigue leyendo.
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Hiperprolactinemia, qué es y por qué se produce
Seguramente si estás intentando quedarte embaraza y te está costando más de lo que pensabas, habrás oído en más de una ocasión los términos prolactina y fertilidad.
La prolactina es una hormona que se segrega en la hipófisis, responsable de la síntesis de leche por parte de las glándulas mamarias y la producción de progesterona en el cuerpo lúteo. Sin embargo, cuando esta hormona se produce en demasiada cantidad cuando la mujer está intentando quedarse embaraza, podría interceder de forma negativa.
La hiperprolactinemia, o exceso de prolactina en sangre, bloquea la producción de la hormona luteinizante, impidiendo que se produzca la ovulación de una manera normal. También se cree que bloquea a nivel hipotalámico la recepción de los estrógenos.
Esta hiperprolactinemia puede ser sólo transitoria o quedarse de forma permanente en la mujer. Los factores que favorecen la aparición de niveles más altos de prolactina en sangre podrían ser la falta de sueño, ejercicio excesivo, o el propio embarazo y la lactancia, así como el uso de algunos fármacos para tratamientos psiquiátricos o estrógenos
El hipotiroidismo, síndrome de ovario poliquístico, tumores dermoides del ovario, lupus o la esclerosis múltiple, también podrían ser causas de la hiperprolactinemia en la mujer.
Síntomas de la hiperprolactinemia
Cuando los valores de hiperprolactinemia son excesivos, se puede detectar a través de estos síntomas recurrentes:
- Trastornos menstruales como la amenorrea, o falta de la menstruación
- Galactorrea, o secreción de leche en el pecho fuera del periodo de lactancia
- Ciclos anovulatorios, dónde aparece la menstruación pero sin presencia de óvulos
- Dolores fuertes de cabeza, localizados justo detrás de los ojos, muy penetrantes
- Disminución de la líbido y dolor durante las relaciones sexuales
Los niveles elevados de prolactina en sangre no tienen por qué suponer un problema grave para la mujer, pero cuando hablamos de hiperprolactinemia y embarazo, existen tratamientos médicos que pueden ayudar a conseguir un embarazo cuando no se ha logrado por ningún otro medio.
Tratamiento de la hiperprolactinemia
Para hacer un diasnóstico, el médico hará un análisis de sangre para detectar valores anormales de la hormona. Esta prueba de hiperprolactinemia e infertilidad siempre forma parte del estudio que se hace a las mujeres que no logran el embarazo.
El tratamiento se aplica a través de unos fármacos llamados agonistas dopaminérgicos, entre los que se encuentran la cabergolina (Dostinex en el mercado), de administración muy fácil y sin apenas efectos secundarios.
Otro fármaco es la bromocriptina ( Parlodel en el mercado), un medicamento que empezó a usarse como tratamiento, y que se sigue aplicando cuando no se obtienen resultados con la cabergolina. En ambos casos, se debe detener el tratamiento cuando se sepa que la mujer está embarazada, para no interferir en el correcto desarrollo del feto.
Entre los efectos secundarios se podrían dar nauseas y vómitos, dolor de cabeza, vértigo e hipotensión, o congestión nasal, efectos que se pueden minimizar si se van aplicando dosis más pequeñas al principio del tratamiento de la hiperprolactinemina, para ir aumentando de forma progresiva.
