Cómo sanar las heridas de la infancia

La forma en la que hemos sido educados, y las experiencias que hemos vivido cuando somos niños, determina mucho la actitud que tendremos en la etapa adulta. Hoy en día se habla sobre las heridas de la infancia, un tipo de daño emocional que es necesario evitar en las siguientes generaciones.

herida de humillacion

¿Te preocupa que tus hijos puedan llegar a desarrollar algún tipo de trauma por no haber hecho las cosas bien en el momento correcto? Esto es una buena señal, ya que implica que quieres esforzarte para darle a tus peques la mejor crianza.

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Por ello, el primer paso es conocer cuáles son las heridas emocionales que pueden sufrir los niños, así como la mejor forma de evitarlas, o de sanarlas si estas llegaran a producirse.

¿Qué son las heridas emocionales de la infancia?

Se conoce como heridas de la infancia a una serie de traumas afectivos que sufren los niños a lo largo de su infancia o adolescencia, y que pueden influenciarles de manera negativa a lo largo de su vida adulta.

Estas heridas emocionales infantiles se pueden traducir en problemas futuros como ansiedad, depresión, pensamientos negativos u obsesivos, insomnio, o dificultad para relacionarse con otras personas, desconfianza, miedo o agresividad, entre otros muchos.

heridas de la infancia

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Es normal que todas las personas tengamos algún recuerdo negativo de la infancia que se mantiene hasta la adultez. Las heridas pueden ser más o menos profundas, pero nunca lo suficientemente graves como para que nos impida alcanzar y mantener una vida feliz.

Estas heridas pueden proceder tanto del entorno familiar, como de cualquier otro ámbito que nos rodea cuando somos niños. Influyen las personas y ambientes cercanos, en la escuela, el hogar, y otros lugares donde se han vivido situaciones que dejan huella en la forma de ser de cada uno.

¿Cuál es el origen de una herida de la infancia?

Muchas de las heridas de la infancia que más afectan a las personas por lo general vienen de un pasado traumático. Puede ser un hogar donde el niño haya sufrido abusos, maltrato, o que haya visto situaciones tensas. También debido al bullying escolar y otros casos graves.

En otras ocasiones puede deberse a que el niño o niña tenga una interpretación de la realidad que sea distorsionada, que no tenga que ver realmente con las situaciones vividas. Sobre todo en niños pequeños que aún no tienen experiencia en la vida, es común que equivoquen las sensaciones que perciben de su ambiente.

frases de heridas del alma

Por ejemplo, un niño puede sentirse abandonado cuando sus padres no le prestan atención, incluso estando con él en casa. También pueden sentirse atacados directamente si en su familia hay una mala relación entre los adultos, llegando a pensar que tiene parte de culpa.

Cada niño es diferente, y también pasa por etapas muy dispares a lo largo de su vida. La forma que tiene de percibir las situaciones varía mucho, y puede influirle más o menos según cómo esté su estado anímico o su desarrollo emocional. Un error en un momento puntual puede marcarle para toda la vida.

Tipos de heridas en la infancia

Hoy en día se habla mucho sobre el tema. Si bien las heridas de la infancia han existido toda la vida, y cada uno hemos crecido con las nuestras, cada vez se hace mayor hincapié en la necesidad de cuidar la salud mental de los niños para que se conviertan en adultos más sanos.

Seguramente no quieras que tus hijos arrastren una herida de infancia toda la vida si puedes actuar correctamente para evitarlo. Por suerte, los estudios en psicología nos hacen más conscientes de las buenas prácticas educativas de las que podemos hacer uso los papás.

Tanto si quieres saber cómo sanar tu niño interior, como evitar que tus hijos tengan que hacerlo en un futuro, es muy importante conocer cuáles son las heridas emocionales más comunes. Las 5 heridas que debes tener en cuenta son las siguientes:

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Miedo al abandono

Las heridas de abandono son las más comunes en la infancia. Los niños que se han sentido de alguna forma solos tienen temor a ser abandonados de adultos. Son personas que tienen una gran dependencia emocional, o que prefieren no involucrarse en las relaciones para evitar problemas.

test heridas de la infancia

Miedo al rechazo

Los niños que no se han sentido aceptados en su familia, en el colegio, o en otros entornos, tienen un gran miedo al rechazo a lo largo de su vida. Pueden llegar a pensar que no se merecen ser amados, y necesitan constantemente que los demás les aprueben en todo momento.

Humillación

Hay veces que los padres criticamos a los niños sin darnos cuenta. Esto mina el autoestima de los pequeños, que pueden desarrollar una mala imagen de ellos mismos. Serán personas que siente que tienen que complacer a los demás, y que necesitan mejorar en todo lo que hacen. Nunca tendrán suficiente, y pueden llegar a sufrir por su autoexigencia.

Traición

Si un niño o niña se siente traicionado por un adulto que no ha cumplido su promesa, nace la herida de la traición. Tienden a desarrollar rencor y desconfianza, convirtiéndose en personas mayores posesivas y muy controladoras.

herida del abandono y su máscara

Injusticia

La última de las 5 heridas de la infancia es la de la injusticia, que se da en niños que se han criado en un ambiente poco afectivo. Suele ser una familia en la que no hay respeto entre los integrantes, o en la que se usa la fuerza y la violencia como manera de educar. Estos niños repiten lo que aprenden, siendo personas abusivas o con mucho miedo a la autoridad.

¿Por qué hay que curar heridas de la infancia?

Las heridas de abandono, traición o humillación nos hacen mucho daño. Sanar heridas de la infancia nos alivia el peso que podemos traer desde nuestra infancia, dejándonos más liberados para poder afrontar la vida desde otra perspectiva.

Estos rasgos que repercuten en la edad adulta no te permiten tener relaciones sanas con los demás o contigo mismo. Existe un gran riesgo de que las mismas heridas que te marcaron a ti, llegues a transmitírselas a tus propios hijos o a los niños que tengas a tu alrededor.

Para que los mismos errores no pasen de generación en generación, es muy importante cortar la cadena. Sanando heridas logramos este efecto. No repitas otra vez esos daños que tanto te afectaron a ti.

Cómo tratar y sanar las heridas de la infancia

Las heridas de la infancia pueden sanarse a cualquier edad. Sin embargo, como bien sabrás, los niños son más flexibles, y cuando antes actúes para corregirlas, mejores serán los resultados.

herida del rechazo y su máscara

Lo mejor siempre es evitarlas. Pero si un niño ya se ha visto afectado por alguna de las 5 heridas emocionales, hay algunos consejos que puedes seguir para actuar a tiempo:

  • Detecta y reconoce esas conductas que es necesario sanar.
  • No busques culpables. Lo único que debes hacer es perdonar y dejarlo ir, eliminar ese sentimiento para siempre de tu vida.
  • Busca ayuda de un profesional que te guíe en el proceso.
  • Junto al psicólogo, analiza cuáles son las cosas que te molestan de los demás y cómo te afectan a ti.
  • A partir de ese momento, piensa siempre antes de actuar, procurando corregir esas conductas negativas.

Cada tipo de herida emocional tiene un tratamiento diferente. En cada paciente además, el proceso será personalizado, ya que no hay dos situaciones que sean completamente iguales, ni si quiera parecidas.

Por ello es tan importante ahondar en las heridas de la infancia y no tener miedo a descubrir por qué están ahí, actuando de la mejor manera para acabar con ellas. Solo así te asegurarás de no volver a cometer el mismo error de aquí en adelante.

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Sobre Pili Rodriguez

Diplomada en Nutrición Humana y Dietética. Licenciada en Ciencia y Tecnología de los Alimentos. Máster Universitario en Microbiología y Parasitología. El Blog de tu Bebé es una ventana digital para dar respuesta a dudas que tenemos los padres durante el embarazo, crianza de los niños, alimentación y otros temas. ¡Te ayudaré encantada!

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