Los probióticos ofrecen numerosos beneficios para la salud intestinal. En tu herbolario de confianza puedes encontrar algunos de ellos indicados para niños, para mujeres, para hombres, para personas mayores o incluso para reforzar el sistema inmunitario. Tal vez te preguntes si se pueden tomar probióticos durante el embarazo, ¿Son estos suplementos igualmente eficaces y, lo que es más importante, seguros?
La salud intestinal durante el embarazo es un tema complejo y los suplementos probióticos pueden servir de apoyo en algunos casos. Para decidir si tomar o no un complemento de este tipo, debes comenzar por conocer el estado de tu salud intestinal a medida que se desarrolla el bebé. Para ello, es recomendable consultar en primer lugar con tu médico.
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El microbioma cambia durante el embarazo
Entre el primer y tercer trimestre la composición del microbioma tiende a cambiar, de hecho, algunos grupos microbianos se vuelven más abundantes. Esta disminución se conoce como “diversidad alfa”, que podría crear un estado proinflamatorio. Esto se refleja en cambios metabólicos, entre los que se incluyen: aumento de peso, disminución de la sensibilidad a la insulina y niveles más altos de marcadores inflamatorios en las heces.
Un aumento de microbios proinflamatorios como Firmicutes y Proteobactreia puede ser en parte responsable de estos cambios. Al mismo tiempo, las bacterias productoras de butirato como Faecalibacterium disminuyen en abundancia. El butirato es un ácido graso de cadena corta que ayuda a mantener un revestimiento intestinal saludable. También puede tener efectos antiinflamatorios, que se reducen a medida que cambia el equilibrio entre los microbios.
Se trata de un proceso habitual en mujeres embarazadas. Sin embargo, es importante seguir prestando atención al cuidado del sistema y flora intestinal durante los meses que dura el embarazo. Esto se debe a que las interrupciones en el microbioma pueden aumentar el riesgo de preeclampsia, diabetes, infección y trabajo de parto prematuro. Todos estos trastornos y afecciones pueden predisponer a tu bebé a tener un sistema inmunológico hiperactivo.
Beneficios de los suplementos probióticos
Cabe señalar que evitar el aumento de peso excesivo puede ayudar a mantener un equilibrio microbiano saludable. En estos casos, si la futura mamá opta por tomar suplementos probióticos, debe saber que el bebé puede beneficiarse de las propiedades y beneficios de los probióticos que está tomando la madre durante el embarazo.
Respecto a los estudios científicos realizados en el área, la investigación sugiere que tomar probióticos durante el embarazo puede tener beneficios que van más allá de la salud intestinal. Esto significa que el mantenimiento saludable del microbioma podría apoyar al bienestar de la madre y el hijo en diferentes aspectos:
- Pueden aportar propiedades antiinflamatorias.
- Disminuye el riesgo de alergias en el bebé.
- Fortalecimiento y entrenamiento del sistema inmunológico en desarrollo para ofrecer una mejor protección contra patógenos y radicales libres.
- Apoyar el aspecto de la piel y prevenir ciertas enfermedades, como el eccema en los más pequeños.
- Aumento de la duración del término para reducir el riesgo de parto prematuro.
- Reducir el riesgo de diabetes gestacional.
Muchos de estos beneficios parecen resultar de cambios en la expresión genética, conocidos como epigenética. Esto sucede a través de la translocación bacteriana, un proceso en el que los microbios probióticos pasan del intestino a la placenta, donde pueden influir en el desarrollo del bebé.
Probióticos para el sistema inmune de las embarazadas
La suplementación de este tipo también puede desempeñar un papel importante en la protección de las defensas y el sistema inmunológico de la madre y el bebé. El cuerpo podría ser capaz de diferenciar entre las células normales y los patógenos. Algunos microbios intestinales, cuando estás embarazada, podrían afectar al desarrollo de células T reguladoras, que previenen reacciones inmunes inapropiadas.
Por lo tanto, a la pregunta “¿puedo tomar probióticos durante el embarazo para aumentar la producción de SCFA (ácidos grasos de cadena corta)? Sí, pero también es importante alimentar a esos microbios beneficiosos reemplazando los alimentos ultraprocesados, ricos en grasas y azúcares por alimentos saludables y ricos en fibra como frutas, verduras, cereales integrales y frijoles. Cuanta más fibra comas, más AGCC (ácidos grasos de cadena corta) podrá producir tu microbioma.
Los bebés reciben probióticos durante la lactancia
La leche materna también puede transferir algunas de las bacterias de tu microbioma al bebé. Además, es un proceso natural que posiblemente ofrezca más beneficios para la inmunidad del pequeño. Los científicos han descubierto firmas de ADN bacteriano en la leche materna de las madres, lo que sugiere que las bacterias intestinales viajan no solo a la placenta sino también a las glándulas mamarias.
Tomar probióticos durante el embarazo y la lactancia no parece proporcionar ninguna protección o beneficio adicional más allá de lo que ocurre naturalmente. Probablemente no haya necesidad de suplementar, ya que la leche materna ya es una fuente rica en probióticos y prebióticos naturales que apoyan el desarrollo del microbioma de su bebé.
No obstante, en algunos casos puede ser beneficioso optar por un complemento alimenticio para embarazadas o lactantes, sirviendo de apoyo nutricional para la madre y el bebé, siempre con el respaldo de un profesional de la salud.
Los probióticos son seguros durante el embarazo
De cara a la investigación existente, la suplementación con bacterias beneficiosas es generalmente segura para la madre y para el desarrollo del bebé. Asimismo, alguna evidencia sugiere que los probióticos podrían reducir los síntomas de depresión posparto.
En este sentido, cepas específicas, como la benéfica levadura Saccharomyces boulardi, pueden ayudar a prevenir las molestias digestivas, especialmente si necesitas tomar un antibiótico durante el embarazo.
En definitiva, elijas o no tomar probióticos durante el embarazo, es importante mantener una buena salud intestinal. La investigación actual sugiere que un microbioma sano y equilibrado en la madre tiene efectos positivos en la salud de los bebés.
Referencias
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