Los atragantamientos en niños son más comunes de lo que podemos pensar, sobre todo cuando el bebé empieza a coger cosas por sí mismo, y llevárselas a la boca. Pero los bebés recién nacidos también pueden sufrir un atragantamiento por diferentes causas, y los primeros auxilios que debemos llevar a cabo en los niños son muy diferentes a los de los adultos. Entonces, ¿qué hacer cuando un bebé se atraganta?
Te mostramos los pasos que debes seguir según la edad del niño, cómo debes actuar y qué cosas no debes hacer en ningún caso cuando se produzca una situación de riesgo.
Qué hacer cuando un bebé se atraganta, pasos a seguir
Cuando notamos que un bebé tiene algún objeto extraño en las vías respiratorias, pueden darse 2 situación:
– Si el objeto no impide que el niño pueda respirar, y el pequeño puede toser y llorar, lo más recomendable es que no actuemos por nosotros mismos, sino que le llevemos rápidamente a un hospital de urgencias para que sean los médicos quiénes eliminen el objeto.
– Si el bebé no puede respirar, debemos actuar cuanto antes, y realizar una maniobra para desobstruir la vías respiratorias, que en todo caso será diferente a la típica maniobra Heimlich de los adultos. ¿Qué hacer cuándo un bebé se atraganta y no nos da tiempo a llegar al hospital?
Cuando el niño es menor de dos años, lo tomaremos sobre nuestro brazo, colocándolo mirando hacia el suelo y con la cabeza ligeramente inclinada hacia abajo. Alternamos dando un golpe seco con la palma de la mano en el hueco entre los dos omóplatos, con una presión torácica con los dedos bajo el externón con el niño bocarriba. Realizaremos estos movimientos hasta lograr que el objeto de la garganta salga y el niño pueda respirar de nuevo.
Si el niño es mayor de 2 años, podemos colocarlo sobre las rodillas, y darle palmadas en la espalda entre los omóplatos. Sólo en caso de que tras 5 palmadas no consigamos hacer que el objeto salga, podremos realizar la maniobra Heimlich, ciñendo al niño por la cintura pasando los brazo por debajo de las axilas, y presionando justo entre el estómago y el externón con un movimiento hacia arriba.
Nunca debemos meter nuestro dedos en la boca del pequeño para quitar el objeto si el niño no puede respirar. De esta forma sólo conseguiremos que el objeto vaya más adentro, y sea más difícil de expulsar.
Tampoco debemos aplicar la maniobra para adultos si el bebé es menor de 2 años, ya que podemos causar un daño muy grave en su hígado, o incluso romper algún hueso del bebé.
Lo mejor qué hacer cuando un bebé se atraganta es no dejarnos llevar por el pánico, actuar rápido y de forma consciente para sacar al bebé de ese momento de peligro cuanto antes.