El yoga para niños es un ejercicio muy sano que pueden practicar los peques de cualquier edad, adaptando siempre las diferentes posturas a sus posibilidades, para así mejorar su condición física, su flexibilidad y equilibrio.
No en todas las ciudades y pueblos existen centros para practicar yoga infantil, ya que sobre todo las clases de yoga se centran en un público adulto, con ejercicios más potentes para mejorar sobre todo la resistencia, o incluso yoga para embarazadas mucho más específico para esta delicada etapa de la mujer.
En el caso de las posturas de yoga para niños, éstas deben ser más suaves y adaptadas a la mayor flexibilidad que tienen sus pequeños cuerpecitos, por lo que lo mejor es recurrir a las más básicas, que por supuesto también son complicadas de conseguir a la primera.
Hoy vamos a ver los muchos beneficios del yoga para niños, cómo podemos adaptarlo a diferentes edades de 1 a 3 años, de 2 a 3 años, de 3 a 6 años, y edades superiores, y diferentes ejercicios de yoga para niños que podemos trabajar fácilmente en casa sin casa.
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Yoga para niños en casa
Practica el yoga para niños como ejercicio habitual es mucho más fácil para los pequeños que para los adultos. El cuerpo de los niños es mucho más receptivo y flexible cuando más pequeños son, y si hacemos juegos de yoga con ellos desde edades tempranas, como por ejemplo el yoga para bebés, desarrollarán un buen hábito de vida, con una mayor capacidad física y flexibilidad envidiable cuando sean adultos.
Para niños inquietos, la respiración en yoga y los ejercicios de meditación también son un buen aprendizaje para canalizar esa hiperactividad. Los mejores ejercicios de yoga infantil son aquellos que combinan tanto ejercicio físico como meditación, a través de los cuáles los niños obtienen todos los beneficios posibles de esta disciplina.
Pero, ¿para qué sirve el yoga para niños exactamente? ¿Cuáles son las ventajas de practicarlo?
Beneficios del yoga para niños
Entre los muchos beneficios del yoga para niños, podemos destacar una mejora del desarrollo de su musculatura y de sus sistema óseo, que se encuentran en pleno desarrollo en estas edades. Los niños aprenden a mejorar la postura de todo el cuerpo, tanto de pie como sentados o tumbados, mejorando y evitando las desviaciones de la columna vertebral con unas simples rutinas diarias o semanales.
Al mismo tiempo, los pequeños mejoran su sistema inmunitario gracias a la práctica regular de ejercicio, y encuentran un equilibro mayor en su estado de ánimo, con una mayor serenidad al canalizar el exceso de energía en los niños más hiperactivos.
Si además se practica el yoga para niños en pareja con sus padres, los lazos entre ambas partes se estrechan mucho más. Compartir este momento tan bonito con tus hijos es un placer que no te puedes perder.
Como puedes ver, la importancia del yoga para niños puede ser muy grande. A priori pueden parecernos ejercicios muy sencillos, pero que aportan muchas mejoras en el cuerpo y en la mente de los peques.
Posturas de yoga infantil
El árbol
Es una postura de equilibro que ayuda a mejorarlo al realizarla poco a poco. Los pasos deben darse uno por uno hasta conseguir la postura completa, ideal para que los niños mejoren su sistema locomotor, con un mejor control de su cuerpo.
El bailarín
Esta postura de equilibro es un poco más avanzada, y al mismo tiempo ayuda a estirar los músculos de las piernas, la espalda, y un estiramiento completo de la columna vertebral. Los niños ganan en flexibilidad al ir aumentando la capacidad de apertura de las piernas hasta llegar al suelo con la mano.
El perro
Es una postura de estiramiento para relajar la espalda, aunque también trabaja la fuerza en los brazos, y la flexibilidad en las piernas y la columna vertebral.
El gato
Otra de las posturas de yoga para niños más sencillas cuya función es relajar y estirar la columna. Debe arquearse la espalda hacia arriba como si fuera un gato, y después bajarla poco a poco para realizar los estiramientos.
La cobra
Esta postura produce un estiramiento de la espalda en sentido contrario, estirando sobre todo los músculos del abdómen al mismo tiempo que se curva la columna vertebral. De esta forma, los niños mejoran la flexibilidad poco a poco, llegando a curvar cada vez más la espalda.
La abeja
Es una postura de yoga de relajación y meditación, dónde los ejercicios de respiración son importantes. A su vez, los niños también mejoran su flexibilidad al acercar la cabeza a los pies poco a poco, con una mayor curvatura de la espalda a medida que entrenan a diario.
La rueda
Estos ejercicios de yoga, también llamados planchas, son perfectos para entrenar varias capacidades. Por un lado se encuentra la fuerza de las piernas, brazos, glúteos y abdomen a tener que adoptar una postura totalmente recta. También se mejora el equilibrio, y se hace un estiramiento de la columna y las articulaciones.
El camello
Se trata de una posición de yoga que no siempre se consigue a la primera, y que quizás necesita algo más de práctica, además de ser supervisada por un adulto. Poco a poco el niño conseguirá una mayor curvatura de su espalda, con estiramiento de los músculos abdominales y una excelente flexibilidad.
Vídeos de yoga para niños
A través de internet podemos encontrar infinidad de vídeos que nos enseñan cómo hacer clases de yoga para niños de infantil, con ejercicios de todos los tipos para poder adaptarlos a la edad y el nivel físico de cada niño o grupo de niños.
Este es uno de los mejores vídeos sobre cómo hacer yoga para niños que hay en Youtube:
También puedes encontrar mucha información y opiniones sobre yoga infantil en la gran cantidad de libros que están a la venta actualmente. Desde libros con cuentos que explican a los niños la procedencia de esta disciplina, hasta manuales paso a paso para hacer yoga con niños de primaria. Pincha aquí para ver algunos de ellos.
Ahora que ya tienes todas las pautas para hacer tus propias clases de yoga para niños en casa, siempre con cuidado y adaptando los ejercicios a las posibilidades de los pequeños, no dudes en empezar a practicarlo para mejorar la capacidad física y mental de tus hijos.
Hermoso!