El oído es uno de los 5 sentidos que toda persona necesita desarrollar a lo largo de su vida. La infancia es un momento crucial para esto, por lo que la estimulación auditiva cobra gran importancia, como parte de la educación que los padres podemos darle a nuestros pequeñines.
Y es que, a pesar de que el oído se puede desarrollar perfectamente por sí mismo, nunca está de más darle una pequeña ayudita para que rinda al máximo. La estimulación, cuanto más temprana sea, más efectiva será para que el bebé adquiera múltiples capacidades.
¿Sabes exactamente qué es la estimulación auditiva y cómo trabajarla con tu bebé? Te contamos todo lo que debes saber con esta completa guía para padres. Así que toma nota y ponte manos a la obra.
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¿Qué es la estimulación auditiva?
La estimulación auditiva consiste en una serie de ejercicios para promover que el bebé escuche antes y mejor. Es decir, comenzar cuanto antes a desarrollar la capacidad auditiva del peque, logrando que relacione los sonidos más fácilmente y aprenda a realizarlos él mismo.
El sentido del oído es muy importante porque el bebé percibe a través de él mucha información acerca de su entorno. Pero no solo esto. Forma parte de uno de los medios de comunicación más interesantes: el habla.
De la misma forma que los padres trabajamos con los bebé para que desarrollen correctamente su sistema motor, el lenguaje, e incluso otros sentidos como la vista, el gusto o el tacto, hay que promover la estimulación del oído.
¿Cuándo hay que empezar con ello? Pues cuanto antes mejor. Desde el nacimiento, si no hubiera ningún problema, el bebé ya dispone de suficiente capacidad auditiva para empezar a conocer y relacionar diferentes sonidos que poco a poco le irán siendo familiares.
¿Cómo funciona el oído en los bebés?
El sentido del oído cambia mucho en las primeras semanas y meses de vida. Desde incluso antes del nacimiento, cuando el pequeño está en la tripa de la madre, es capaz de reconocer la voz de esta y de las personas que suelen estar cerca.
Poco después, el recién nacido reacciona ante estímulos sonoros, como por ejemplo sonidos fuertes que le asustan, o sonidos familiares que relacionan con determinados momentos o actividades.
Con unos 3 a 4 meses de edad, los niños ya empiezan a buscar de donde vienen los sonidos que le llaman la atención, moviendo la cabeza o el cuerpo hacia la fuente. Un par de meses más tarde, comienzan a hacer sus propios sonidos imitando otros.
Se estima que alrededor del primer año de vida, el bebé ya tiene un desarrollo del sistema auditivo casi completo. Identifican la procedencia de los sonidos, son capaces de relacionarlos, e incluso los reproducen con facilidad. No te pierdas cómo estimular de forma auditiva al bebé.
Actividades para estimular la audición en bebés
Debido a la importancia que tiene la estimulación auditiva temprana en bebé, existen múltiples juegos y actividades que puedes poner en práctica en el hogar o en el aula para fomentar el sentido del oído.
Vamos a ver los juegos más atractivos para los bebés, muy fáciles de realizar, y altamente efectivos para el fin que estamos buscando:
Escuchar música
Comenzamos por una de las mejores actividades para niños de 1 a 3 años, que también se puede empezar a utilizar mucho antes, incluso en recién nacidos. Y es que escuchar música es una de las mejores estimulaciones para el oído, que llama la atención de los pequeños de cualquier edad.
Aprovecha para escuchar música en familia de una forma activa. Es decir, pon música para escuchar directamente la melodía y la letra (si la canción la tuviera), poniendo toda la atención. Canta o baila con el bebé para intensificar aún más la actividad.
Puedes hacer una escucha pasiva de música, que en determinadas ocasiones funciona genial. Por ejemplo, mientras el bebé está haciendo otras actividades, como comer, el momento del baño, dibujar, o jugar con sus juguetes favoritos. De manera indirecta su oído se estará familiarizando con el sonido.
Leer el voz alta
Damos un pasito más, fomentando la escucha activa a través de la lectura de cuentos. Para niños a partir de un año funciona muy bien. Del mismo modo, podemos comenzar a leer cuentos a bebés pequeños que empiezan a comprender las palabras o que se tranquilizan con la voz de papá o mamá.
Elige una historia divertida, adecuada para la edad del niño. Mejor si el libro va acompañado de imágenes bonitas que al mismo tiempo desarrollen el sentido de la vista del peque.
Léele el cuento para estimular el oído y el cerebro, ya que poco a poco el bebé irá relacionando las palabras con conceptos como los mostrados en los dibujos o interpretados a través de mímica.
Seguir el sonido
Para que el bebé aprenda a localizar de donde viene el sonido, este juego te será de gran utilidad. Puedes hacerlo de varias maneras según la edad de cada pequeño.
Por ejemplo, para los niños de 6 meses que empiezan a detectar claramente la procedencia del sonido, emite ruidos o música desde diferentes lugares. También puedes mover un objeto sonoro alrededor suyo, para que lo siga con la mirada o con la cabeza.
En niños más mayores, pídele que busque determinados objetos diciéndole la forma o el color. Por ejemplo, que te señale su pelota, o un objeto que sea de color rojo. La clave está en relacionar el sonido de la palabra con el objeto en sí.
Relacionar el sonido
Vamos a hacer un juego de emparejar el sonido con un concepto concreto. Este juego es otro de los que tienen varias posibilidades.
Un ejemplo muy sencillo: utiliza imágenes o muñecos de animales para que el bebé lo relacione con los sonidos que hacen. Si tú emites el sonido: ‘Muuu’, seguro que tu peque sabrá que lo está haciendo la vaca, y que la oveja hace ‘Beee’.
También puedes decirle nombres de cosas, y que él te diga qué sonido hacen. Por ejemplo, ¿cómo hace el coche? ¿cómo hace el tren? ¿cómo ronca el bebé cuando duerme? Y así múltiples conceptos que irá aprendiendo poco a poco.
Jugar con instrumentos musicales
Otro de los juegos que más nos gusta, y que recomiendan los expertos en estimulación auditiva, es utilizar instrumentos musicales. Y es que la música es una de los mejores estimulantes para personas de todas las edades.
Experimenta con tu peque y diferentes instrumentos. Utiliza juguetes como un xilófono, una trompeta o un tambor. Prueba con una pequeña guitarra, o haz una batería casera con objetos que tengas en casa.
También puedes poner música e intentar adivinar qué instrumentos son los que están sonando. Ya sean de viento, percusión o cuerda, seguro que tu bebé se convertirá en todo un experto.
¿Cómo debe reaccionar un bebé ante un estímulo sonoro?
¿Qué pasa si un bebé no reacciona como debería a un estímulo sonoro? Obviamente, también se pueden dar problemas auditivos en el bebé que impidan o dificulten su correcto desarrollo.
Por este motivo, los padres debemos prestar atención a la actitud de los bebés, y sobre todo, a la forma que tienen de reaccionar. El recién nacido debe tener algún tipo de reacción física al escuchar sonidos bruscos o la voz de una persona conocida.
Poco a poco, lo normal es que el niño busque con la mirada, mueva la cabeza o el cuerpo, si hay un sonido que llama su atención, como por ejemplo alguien llamándole o una canción divertida.
Si notas que tu bebé no reacciona ante de los sonidos, incluso si estás practicando la estimulación auditiva en casa con frecuencia, lo mejor es acudir rápidamente al pediatra. No te preocupes, no tiene por qué ser nada grave. Pero siempre es mejor prevenir, y actuar lo antes posible en caso necesario.
Otros consejos para estimular el sentido del oído
Veamos otros consejos muy prácticos para estimular la audición de los niños de manera temprana:
- Juega con tu peque a hacer diferentes sonidos con la boca o con el cuerpo. Una manera divertida para comunicarte incluso sin palabras.
- Proporciónale juguetes que hagan sonidos, como sonajeros, llaveros, campanas, e instrumentos musicales de juguete como los que hemos mencionado.
- Canta canciones en tu idioma o en inglés para que el peque comience a practicar pronunciación. Una forma muy divertida de aprender a hablar correctamente.
- Aprende onomatopeyas de todo tipo de sonidos, y practícalas en casa o en el aula.
- Escucha música relajante siempre que sea posible. En el momento de comer en familia, en el baño, al hacer los deberes, o cuando más os apetezca.
- Háblale mucho a tu bebé. Incluso aunque creas que no te entiende, estará aprendiendo a través de los sonidos y de tus expresiones.
¿Y tú, cómo sueles practicar la estimulación auditiva con tu bebé? ¿Hay algún juego de sonidos que os guste mucho y que practiques con frecuencia? ¡Cuéntanos a los demás papás para seguir aprendiendo de las experiencias de otros!
Toda estimulación es poca para nuestros peques…
Gracias,
Besos,
A. Moreno