La lombrices en niños, también llamados oxiuros, son unos pequeños gusanitos que se encuentran en el intestino y que pueden causar muchas molestias en los pequeños. No tienen por qué causar ningún problema grave si se tratan a tiempo, pero si no aplicamos un tratamiento en las primeras etapas, las lombrices en el ano pueden derivar otros problemas en los niños como la falta de apetito o el cansancio e irritabilidad, dos factores que afectan negativamente al desarrollo del niño.
La gran mayoría de los niños han tenido alguna vez lombrices anales, incluso sin que los padres no hayamos dado cuenta, ya que son muy comunes y además muy contagiosas. Pero es posible evitarlas si tenemos cuidado, y poder acabar con ellas si seguimos el tratamiento de las lombrices en niños más adecuado para la edad del pequeño.
Vamos a ver cómo se contagian estas molestas lombrices en los niños, cuáles son los síntomas que nos ayudan a los padres a detectarlas de forma precoz, y algunos remedios para las lombrices que podemos llevar a cabo en casa si el problema no es demasiado grave, antes de tener que acudir al médico.
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Lombrices en niños; síntomas para detectarlas
Las lombrices en niños también se pueden encontrar en adultos, pero es mucho más frecuente encontrarlas en los pequeños, ya que el contagio se produce sobre todo cuando los niños se llevan las manos sucias a la boca.
Los huevos de estos pequeños gusanos se encuentran en la tierra, y se pueden adquirir por ejemplo cuando tomamos frutas y verduras que no han sido lavadas adecuadamente, aunque en casa la fruta y verdura ya suele venir limpia, y es raro que el contagio se produzca así. Los niños que han estado jugando en la tierra del parque o del jardín, pueden llevarse los huevos de estos parásitos en las manos o bajo las uñas, y al meterse la mano en la boca, entrar en su sistema digestivo y comenzar la infección.
Los niños que ya están infectados también pueden contagiar a otros niños y a los miembros de su familia, ya que los huevos se dispersan con mucha facilidad, y al final pueden acabar todos a su alrededor con pequeños gusanos en el ano sin que se den cuenta.
¿Pero cómo saber si un niño tiene lombrices?
Los primeros síntomas que notamos en el niño cuando están infectados por las lombrices, es que se encuentran cansados y sin hambre. Esto es debido a que por la noche las larvas avanzan hacia el final del colon, situándose en el ano y causando un picor tan molesto que no permite a los niños dormir. Los niños se pasan la noche despiertos rascándose, y se vuelven más nervioso, irritables y apáticos. También se pueden presentar molestias en la tripa cuando la infección es tan grande que el niño tiene mucha cantidad de gusanos en su intestino, aunque rara vez se llegan a estos extremos si estamos atentos a los síntomas y ponemos solución inmediata.
Uno de los síntomas que nos confirma la presencia de estos gusanos es encontrar lombrices en las heces. Cuando las encontramos, debemos actuar rápido y empezar con una prevención en toda la casa para evitar más contagios en toda la familia, y un tratamiento para el niño y cualquier persona adulta que también pueda estar infectada con las lombrices.
Tratamiento para las lombrices en niños
Estos parásitos intestinales en niños precisan de un tratamiento médico para poder eliminarlos cuanto antes y sin dejar rastro, pero en casa podemos llevar a cabo diferentes tratamientos para prevenir el autocontagio de las lombrices intestinales en niños, y evitar las molestias en los pequeños para que puedan descansar mejor por la noche.
- Extrema las medidas de higiene en el pequeño, haz que se lave las manos cuando juegue fuera de casa, y que no se lleve las manos a la boca cuando no las tiene limpia.
- Corta las uñas del pequeño bien cortita, y procura siempre mantenerlas limpias por debajo, para evitar que la suciedad que pueda contagiar los huevos de lombrices se acumule ahí.
- Limpia al culete del pequeño con agua y jabón cada vez que le cambies el pañal o cuando haga pis o caca.
- Si el niño ya tiene lombrices, evita que se dispersen por la casa y que contagie al resto de la familia y de nuevo a él mismo manteniendo a raya los huevos. Lava cada día las sábanas del pequeño con agua caliente, así como su ropita interior y los pijamas.
- Asegúrate de que el niño utiliza su propia toalla de ducha, así como una toalla de mano, y que no la utilice nadie más de la familia.
- Antes de ir a la cama, aplícale en el culito un poco de pomada anti-picor especial para las lombrices, o bien un poco de aceite de oliva para que no le molesten las larvas. Este remedio casero será temporal hasta que el tratamiento médico haga su efecto y acabe con ellas desde dentro.
Lombrices tratamiento médico
Cuando detectes estos pequeños gusanos en las heces del niño, o cualquier de los síntomas descritos, acude al pediatra para que pueda aplicarle el tratamiento adecuado.
El tratamiento para las lombrices en niños consiste en un jarabe o pastillas (como por ejemplo Lomper) que acaba con los parásitos actuando desde el intestino. Las larvas dejarán de aparecer un par de días después, y los gusanos del intestino morirán del todo en un par de semanas.
Hasta entonces, sigue las medidas de prevención del contagio, y el tratamiento aconsejado por el médico hasta el final; no lo dejes a la mitad, porque si no se eliminan por completo, las lombrices pueden volver a aparecer.
Una creencia popular asegura que las lombrices en niños aparecen cuando los niños toman dulces, pero no es así. Las lombrices se contagian a través de los huevos, pero sí que es más complicado eliminarlas si el niño toman mucho dulce, ya que se alimentan sobre todo de la glucosa. Así que mientras el niño siga el tratamiento para eliminarlas, procura que tome menos dulces, y así desaparecerán antes. Si te gustó el artículo no te pierdas otros de la categoría “Salud del Bebé” del blog.