¿Tu hijo suele tener comportamientos agresivos y te pega cuando se enfada y se siente frustrado? No te preocupes, no es nada personal. Se trata de un mecanismo de defensa más común de lo que crees en los niños.
Sí que es verdad que este comportamiento puede llegar a ser molesto, sobre todo cuando los niños pasan por una etapa complicada en la que tienen más rabietas. Ya sea en casa o fuera de esta, los niños no piensan y actúan directamente, golpeando, pateando, o incluso mordiendo a quien tienen delante.
Por suerte, hay algunas pautas a seguir para evitar que tu hijo te pegue. Hay que actuar poco a poco y con mucha paciencia, corrigiendo estos comportamientos y dándole al peque las herramientas que necesita para controlar el enfado.
Descubre por qué motivos un niño pega cuando se enfada, cuándo hay que preocuparse, y qué límites no hay que dejar pasar. También los mejores consejos que yo misma he usado si no hago lo que quiere se enfada y mi hija me pega.
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¿Por qué un niño insulta o pega cuando se enfada?
Cuando todavía son pequeños, los niños no saben cómo actuar correctamente ante determinadas situaciones. Si se sienten frustrados, indefensos, molestos o enfadados, y no pueden expresarlo de otra manera, la tendencia es llorar y pegar.
Este comportamiento es parte de la naturaleza del ser humano, y es absolutamente normal. Sin embargo, la educación nos enseña con la edad a gestionar las emociones, y pasamos de un comportamiento agresivo a una forma de mediación a través de las palabras.
Esto no quiere decir que todos los niños actúen pegando cuando se enfadan. Tampoco implica que este comportamiento deje de darse a una determinada edad. Cada caso es importante, ya que la educación de un niño depende de muchos factores externos.
Si es tu caso que tu hijo te pega cuando se enfada, y no sabes cómo actuar, el primer paso es encontrar la causa. Trabajando sobre la raíz del problema serás capaz de encontrar la mejor solución. Estas son las posibles razones a tener en cuenta:
Agresividad momentánea
Puede que a tu hijo le pille un mal momento, y que se ponga violento de manera puntual porque necesita cubrir una necesidad básica. Esto ocurre cuando los peques tienen mucho sueño o mucha hambre, provocando que no puedan regular sus respuestas, y salga su naturaleza.
Problemas emocionales
Hay niños que tienen más dificultad para aprender a regular sus emociones. Esto es común también en adolescentes y personas adultas que tienen problemas de depresión, ansiedad, trastornos del espectro autista, o incluso TDAH. Necesitarán trabajar un poquito más que los demás para lograrlo.
Fallos en la educación
Por supuesto, también puede deberse a un fallo en la educación que los niños han tenido. Los padres intentamos hacerlos lo mejor que podemos, con las herramientas que tenemos. Pero no siempre llegamos al nivel necesario. No te preocupes si es tu caso; no es tu culpa. Por suerte, le puedes poner remedio y corregirlo.
Exposición a la violencia
Otro aspecto a tener en cuenta son los niños agresivos con sus padres y con otras personas porque han estado expuestos a la violencia.
Ya sea en su propia casa, un abuso físico que hayan sufrido dentro de la familia o en la escuela, o a través del consumo de material violento en internet, la televisión o los videojuegos. Al final lo normalizan y no son conscientes del daño que produce.
Cuándo preocuparse por los niños que pegan a sus padres
Cuando mi hijo de 3 años me pega de forma puntual cuando está irritado, no es motivo de alarma. Como ya hemos indicado, los peques pueden pasar por diferentes fases. En su etapa de aprendizaje, poco a poco irán comprendiendo lo que está bien y está mal.
Pero si este comportamiento sigue, o si empeora, no hay que dudar en poner límites y evitar que vaya a más. Fíjate en estos signos de alarma:
- Si pegar se convierte en su única respuesta para afrontar los enfados.
- Cuando este comportamiento le impide tener relaciones sociales sanas.
- En el caso de que el niño ya sea mayor, tenga otras vías de expresarse, y aún así sigue utilizando la violencia a través del insulto y los golpes.
- Si intentas razonar con él y no hay manera de que entienda que pegar está mal.
- Por supuesto, si llega a una situación límite en la que hace daño a sus compañeros de escuela, a sus padres, hermanos, incluso le pegan a una abuela mayor.
Consecuencias negativas para un niño que pega cuando se enfada
Las consecuencias de no corregir este tipo de comportamientos a tiempo ya te las puedes imaginar. Un niño que muestras una tendencia agresiva ante la frustración y el enfado podría no causar buen impresión, no solo dentro de la familia más cercana, si no en cualquier otro ambiente.
Cuando se hacen mayores, serán personas que no son capaces de resolver sus problemas y conflictos sin tener que llegar a la violencia. Esto les impide tener relaciones saludables con sus compañeros, con amigos, y por consiguiente, con su pareja.
En el cole corren el riesgo de convertirse en marginados sociales, o sentir el rechazo de sus profes. Influye de manera directa en sus estudios, ya que al mismo tiempo dificulta el aprendizaje a diferentes niveles.
Los niños que pegan a sus padres no saben cómo actuar con otras personas. Además de la mala relación con la familia, tampoco sabrán actuar correctamente fuera del núcleo familiar. Y esto es un problema serio.
¿Qué hacer si mi hijo me pega?
¿No sabes qué hacer si tu hijo te pega y te preocupa? Vamos a verlo a través de los consejos de los expertos en comportamiento infantil:
Poner límites
Antes de que el comportamiento del niño vaya a peor, háblalo con él y establece una serie de normas frente a situaciones de estrés. Es muy importante hacer esto mientras el peque está calmado, explicándole por qué no debe pegar, y qué puede hacer en estas ocasiones para comunicar su malestar.
Evitar reacciones violentas
Si te molesta que tu hijo actúen de forma violenta, no lo hagas tú. Cuando te pegue, no le respondas de la misma forma, ni tampoco gritando o insultando. Si ven que los adultos también actúan así será algo normal para ellos, y acabarán por adaptarlo a su rutina.
Controlar la impulsividad del niño
Si un niño tiene tendencia a responder impulsivamente, evita las situaciones que puedan comprometerle. Por ejemplo, no dejes que llegue al límite de tener mucha hambre o sueño, o haz ejercicios de relajación para que esa impulsividad se vaya poco a poco.
Educar de forma empática
Ponte en el lugar de tu hijo. Si te pega cuando se enfada, intenta averiguar por qué lo ha hecho, cómo se siente, y qué es lo que necesita. Puede que aún no haya aprendido a expresar sus sentimientos, a controlar las rabietas, y lo mejor es ir dándole las pautas necesarias para que las adquiera a su debido tiempo.
Otros consejos de educación infantil
La educación de un niño es un tema difícil. A veces somos los padres quienes más aprendemos cuando, sobre la marcha, vamos descubriendo las mejores herramientas para que los peques se conviertan en esas personas que quizás nosotros mismos no supimos ser.
No te pierdas estos otros consejos que compartimos en El Blog de tu Bebé para seguir aprendiendo más sobre educación infantil:
- Cómo sanar las heridas de la infancia
- Consejos para lidiar con un hijo tóxico
- 8 Actividades socioemocionales para niños
- Cómo fomentar el compañerismo en el aula
- Ayudar al niño a reconocer las malas influencias
Ya sabes cómo evitar o actuar correctamente si tu hijo pega cuando se enfada. No dejes que esto se convierta en una costumbre, y corrígelo de la mejor manera en el momento adecuado.