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Se conoce como diabetes gestacional a la diabetes que se produce en la mujer durante el embarazo, sin que antes de éste haya habido otros síntomas asociados a ella. Debido a esta diabetes en la embarazada, los niveles de glucosa en sangre son mayores, pudiendo afectar a su salud, pero sobre todo a la salud del feto que se encuentra en pleno crecimiento y que aún no cuenta con el mecanismo necesario para enfrentarse a unos valores altos de azúcar.
La diabetes en la maternidad puede ser peligrosa, pero si nos preocupamos en controlar la diabetes de una forma adecuada, a través de dieta, ejercicio físico, y la toma de algún medicamento en caso necesario, los riesgos en la madre y del desarrollo fetal (sin malformaciones) son prácticamente nulos.
Pero, ¿por qué ocurre la diabetes gestacional? ¿por qué se produce en este momento tan delicado? ¿cómo nos puede afectar en el caso de que nos ocurra?, ¿cómo manejar la diabetes gestacional? Estas preguntas y algunas más, le daremos respuesta en este artículo.
Vamos a ver las causas por las que se produce un descontrol de azúcar en el embarazo, los síntomas de la diabetes en la mujer, en qué consiste la prueba de diabetes para detectarla, y cuáles son los tratamientos más adecuados para controlarla, así como la dieta para diabetes gestacional que debe seguir la mujer en todo el proceso. ¡Toma nota!
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¿Qué es la diabetes gestacional?
La diabetes gestacional es un tipo de fisiopatología que se presenta en el embarazo, en alrededor del 7% de las mujeres que se quedan embarazadas. Por esta razón, a la mujer se le hace una prueba de diabetes alrededor de la semana 25 de embarazo, para poder detectarla a tiempo antes de que se puedan producir daños en la madre o en el feto.
La diabetes produce un aumento de la glucosa en el embarazo, exactamente de la cantidad de azúcar que se encuentra en la sangre, uno de los síntomas de ser diabético que siempre se repiten en esta enfermedad. Tener azúcar en el embarazo se debe a que no se puede retirar de la sangre de forma efectiva para acumularse en forma de depósito, con un nivel en sangre elevado, que será diferentes según las clases de diabetes.
Los síntomas de azúcar en sangre ocasionados por la diabetes pueden ser muy peligrosos, sobre todo en casos de embarazo y diabetes, ya que pueden afectar de forma muy nociva a la madre, pero más al feto.
Causas más frecuentes de este tipo de diabetes
Entre las causas más frecuentes de la diabetes mellitus gestacional destacan los cambios hormonales que se dan en la mujer durante el embarazo. Estos cambios hacen que el nivel de azúcar en sangre sea más elevado, con la finalidad de alimentar al bebé con suficiente energía, aunque en algunos casos se puede descontrolar y provocar síntomas del azúcar peligrosos.
La cantidad de glucosa en sangre es más elevada durante más tiempo del habitual, algo muy normal en la mujer embarazada. Sin embargo, cuando estos niveles de azúcar se mantienen altos mucho tiempo después de cada comida, el riesgo va aumentando.
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Síntomas de la diabetes en el embarazo
En muchas mujeres, los síntomas de azúcar alta son imperceptibles, y se llega a detectar la diabetes en el embarazo a través de un estudio rutinario que todas las mujeres embarazadas deben pasar.
En otras mujeres se pueden dar síntomas de diabetes gestacional moderados como tener más sed de lo normal, y algunos temblores diarios. No tienen por qué ser peligrosos si son puntuales, ya que puede ser un simple bajón de azúcar o una subida súbita que se controla después por el propio organismo.
Cuando los síntomas de azúcar son persistentes, la mujer puede notarlos de esta forma:
- visión borrosa
- mareos, cansancio y fatiga
- aumento de sed
- aumento de la producción de orina
- infecciones repetidas de vejiga
Factores de riesgo en la diabetes materna
A priori, cualquier mujer puede sufrir una diabetes gestacional durante el embarazo, aunque sí que es cierto que existen algunos factores de riesgo que aumentan la predisposición de la mujer a padecerla. Entre ellos destacan:
- Embarazo en edades mayores a los 25 años
- Antecedentes de diabetes mellitus familiares
- Diabetes mellitus en un embarazo anterior
- Sobrepeso, obesidad y aumento de peso excesivo durante el embarazo
- Hipertensión durante el embarazo (más detalles sobre la preeclampsia)
- Síndrome de ovarios poliquísticos
Tratamiento de la diabetes
El tratamiento debe ser siempre dirigido al control de los síntomas de diabetes en la mujer, de forma que el azúcar en sangre no se mantenga demasiado alta durante demasiado tiempo después de cada comida.
La futura madre deberá tener un control diario de sus niveles de azúcar en la sangre (glucemia), durante el embarazo e incluso después, ya que la diabetes mellitus también puede ocurrir después del parto.
Será necesario controlar los niveles de azúcar después de cada comida para mantenerlos dentro de un rango adecuado. En el caso de que se encuentren niveles de azúcar baja o alta como consecuencias de la diabetes, el médico podrá prescribir a la paciente el uso de insulina o cualquier otro medicamento oral o inyectable para controlarlo.
La otra parte del tratamiento es una dieta para embarazadas con diabetes, acompañada siempre de ejercicio físico con un nivel adecuado según las posibilidades de las futuras mamás. La actividad física hace que eliminemos el azúcar en sangre de una forma más natural, sin tener que inyectar insulina para retirarla.
Dieta para la diabetes gestacional
La dieta para la mujer embarazada que sufre cualquier tipo de diabetes, ya sea diabetes mellitus tipo 1, tipo 2 o gestacional, es muy similar a la que debe seguir cualquier embarazada. Siempre completa y variada, evitando los alimentos menos saludables, y tomando una mayor cantidad de alimentos vegetales como legumbres, frutas y verduras.
Los alimentos prohibidos en la dieta serán aquellos que contengan una mayor cantidad de azúcares, sustituyéndolos por otros que contengan más fibra para poder controlar de forma natural los niveles de glucosa en la sangre.
Con todas estas pautas sobre la diabetes gestacional, y los consejos que te dé tu médico para tener un embarazo controlado sin necesidad de llegar a un parto inducido antes de la fecha natural, podrás mantener tu salud y la de tu futuro bebé durante todo el embarazo, para poder recuperar tu estado normal postparto y seguir cuidándote sin preocupaciones.
