Antes de su nacimiento, el bebé vive y se desarrolla durante varios meses en un medio acuoso que le protege y le da seguridad. Por este y por otros motivos, muchos expertos en pediatría recomiendan comenzar con la natación para bebés cuanto antes, mientras los peques aún conservan ese reflejo que le permite estar bajo el agua con seguridad.
Los beneficios de la natación para bebés son muchos. Desde el gran aliciente que supone para los niños pasar un rato divertido en el agua con su papá o mamá, hasta otras muchas otras ventajas que veremos a continuación.
La ‘matronatación’, o natación con bebés es una actividad que cada vez está cobrando más importancia. Después de conocerla en profundidad, tú también te vas a animar a practicarla con tu peque. ¡Vamos allá!
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¿Qué es la matronatación?
También conocida como ‘natación para bebés’, la matronatación es una actividad que, más que centrarse en que los niños aprendan a nadar, permite estimular los sentidos de los bebés a través de diferentes ejercicios.
El medio acuático proporciona al bebé una serie de estímulos muy concretos para su desarrollo físico, motor y psicológico. Los ejercicios y juegos que se practican están especialmente diseñados para los bebés y niños de corta edad.
Los niños la practican desde el nacimiento, siempre junto a sus papás, estrechando lazos y ganando confianza y seguridad el uno del otro poco a poco. Estos ejercicios se llevan practicando en muchos países de Europa desde los años 60, y tienen múltiples beneficios demostrados.
Si bien también la pueden practicar los papás con sus bebés, a la mamá le viene muy bien hacer matronatación. Estar en el agua ayuda a la recuperación postparto, al mismo tiempo que se disfruta de un tiempo muy especial con el bebé.
Objetivos de la matronatación
Como ya hemos dicho, la natación para bebés no se trata de unas clases de natación al uso, en las que se espera que los niños aprendan a defenderse en el agua y nadar con total libertad. Esta actividad tiene otros objetivos muy concretos.
Hay papás que se esperan a que los niños tengan cierta edad para apuntarles a clases de natación. Pero la matronatación se puede hacer desde el nacimiento del bebé, siempre con la compañía de los papás, y la supervisión del monitor.
Los objetivos de esta actividad se pueden resumir en los siguientes puntos:
- Disfrutar del contacto con el agua en compañía de los papás.
- Relacionarse con otros bebés de su misma edad.
- Nuevas experiencias en el medio acuático.
- Desarrollo físico y motriz del bebé con mayor seguridad.
¿A qué edad puede empezar a nadar un bebé?
El bebé tiene la capacidad suficiente para estar en el agua desde el mismo momento de su nacimiento. Siempre acompañado por un adulto, por supuesto.
Lo habitual es que una vez que la madre se ha recuperado después de dar a luz, y una vez que tiene su rutina establecida, comience entre los 3 y 6 meses a practicar la natación para bebés con su pequeño.
En el caso de querer empezar antes, si la mamá no se encuentra físicamente al 100% para disfrutar de una sesión de baño en la piscina, es el papá quien puede empezar las clases con el peque.
Cada familia tiene sus propios tiempo de adaptación, y es normal que algunas comiencen antes que otras. Desde los 0 meses hasta los 36 meses, la natación para bebés adapta el tipo de juegos y ejercicios a sus capacidades, de manera que el peque pueda aprovecharlas mucho mejor.
Beneficios de la natación para bebés
No importa a la edad que empiece el bebé a practicar natación. El contacto del peque con el agua trae consigo múltiples ventajas para su salud y para su desarrollo.
Los beneficios de la matronatación son tanto para el bebé como para la madre o el padre. Vamos a ver los más destacables:
Perder el miedo al agua
Uno de los beneficios de la natación para bebés más importantes es el hecho de que el niño se familiarice con el agua y pierda el miedo desde que son muy pequeños.
No vamos a conseguir que aprendan a nadar con menos de 1 año de edad, pero sí que estén más predispuestos a ellos cuando sean un poco más mayores.
El bebé gana muchos más reflejos en el agua, agiliza sus movimientos y se siente más seguro. Mejora la autoestima del peque al verse capacitado para dominar un medio diferente a lo que está acostumbrado como en el agua.
Desarrollo psicomotor
Los bebés que aún no caminan o gatean ya puede moverse como peces en el agua. Con la matronatación se gana mucha más agilidad dentro del agua, fortaleciendo sus músculos y predisponiéndole a que comience a moverse con una menor edad.
Está comprobado que los bebés que practican la natación, gatean y caminan mucho antes. También obtienen una mejor autonomía, que se traslada al resto de actividades físicas que aprende a medida que se hace mayor.
Fortalecimiento cardiorrespiratorio
De la misma forma, otro de los beneficios de la natación para bebés es que el pequeño se hace más fuerte al ejercitar su sistema cardiovascular y sus pulmones.
Esto es muy interesante sobre todo para prevenir problemas respiratorios como el asma, y la aparición de alergias. Si el niño ya hubiera nacido con alguno de estos problemas, es mejor consultarlo con el pediatra y seguir las recomendaciones a la hora de realizar la matronatación.
Mejor relación con los papás
Como ya hemos visto, este tipo de actividades se llevan a cabo directamente con el papá o la mamá, a pesar de que hay un monitor que dirige la sesión de natación. Lo más importante es que sean los padres quienes enseñen al bebé a moverse en el agua.
De esta forma se estrechan los lazos afectivos entre ambas partes. Aumenta la confianza y la seguridad, y sobre todo el amor.
También favorece mucho que el bebé comience a moverse en otros círculos sociales que no sea su casa y su familia mas cercana. Las clases de natación dirigida para bebés les ayuda a socializar con otras personas, tanto con adultos como con niños de su misma edad, pasando momentos realmente divertidos.
Otros beneficios de la natación para bebés
Además de estos beneficios de la natación para los bebés, caben destacar algunos muy interesantes:
- Es una actividad que les abre el apetito a los peques. Justo al terminar, comerán con más ganas.
- Se trata de un ejercicio muy relajante dentro del agua, favoreciendo que por la noche estén más cansados y duerman mejor.
- Mejora la condición física del bebé, siendo uno de los primeros ejercicios cardiovasculares que pueden practicar desde su nacimiento.
- Los bebés que se familiarizan con el ejercicio tienen un menor riesgo de sufrir obesidad durante la infancia y la edad adulta.
- Mejora habilidades como la atención, la memoria y el desarrollo cognitivo a una edad muy temprana.
- Desarrolla sus capacidades vitales de supervivencia.
¿Cómo son las clases de matronatación?
En cada escuela o academia, las clases de natación para bebés se dan de una manera diferente. Estas siempre deben impartirse por un profesional cualificado, que asista en todo momento al progenitor para cuidar la seguridad del bebé durante los ejercicios.
La clase suele durar entre 30 y 45 minutos, en los que el bebé estará íntegramente en el agua. Hay que tener en cuenta el tiempo para ponerle al bebé la ropa de baño, y retirarla una vez terminada la clase.
Muchas de las actividades solo requiere la participación del papá o la mamá. Según la edad del bebé, en algunos ejercicios se utilizan materiales como pelotas, tablas o churros adecuados a la actividad y las necesidades del niño.
Otros consejos interesantes para el desarrollo del bebé
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Como ves, los beneficios de la natación para bebés son muchos y muy positivos. Además es una actividad de verano en la que lo pasareis genial dándoos un chapuzón fresquito, o en invierno en una piscina cubierta climatizada. ¿Te atreves tú también a practicarla con tu peque?
ya qué guapos!! 🙂 Es verdad, natación para los bebes está muy bien. 🙂
Gracias Petra por comentar 🙂