Las primeras horas del recién nacido son cruciales para asegurarse de que está completamente bien de salud. Conocidas como las primeras pruebas del bebé, consiste en una series de análisis y medidas que se hacen al pequeño nada más nacer o durante las primeras horas, con el fin de detectar posibles problemas que necesiten tratamiento urgente.
Durante la realización de estas pruebas y vacunas, en esos instantes en los que los médicos y enfermeros están manipulando al bebé, los padres podemos pasarlo fatal.
Por este motivo es recomendable estar bien informados de todo lo que se le hace al recién nacido, evitándote a ti misma sufrir más de lo necesario
Toma nota de las primeras pruebas del bebé recién nacido, para ser consciente de los pasos que seguirán en el hospital con tu bebé.
Desde que el bebé ve la luz hasta que os marcháis del hospital, los profesionales sanitarios harán todo lo necesario para que el pequeño se vaya a salvo a su casa, libre de cualquier riesgo que se pueda evitar.
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¿Por qué se hacen las pruebas al recién nacido?
Conocido por el término de ‘atención al recién nacido después del parto’ o ‘pruebas de cribado neonatal’, las primeras pruebas del bebé consisten en una serie de medidas y análisis de todo tipo para asegurar que el pequeño goza de buena salud.
Si bien hoy en día existen múltiples sistemas que ayudan a analizar el estado del bebé antes del nacimiento, cuando aún está en el interior del útero, la mejor forma de comprobarlo es a través del tacto y de una revisión más exhaustiva cuando el niño ya ha nacido.
En muchos casos es de suma importancia hacer un diagnóstico precoz, de manera que se pueda actuar lo antes posible asegurando la salud plena del bebé.
Con estas pruebas se detectan problemas metabólicos, hormonales, malformaciones o deficiencias en el pequeño, obteniéndose los resultados de inmediato antes de que el bebé se marche a su casa.
Aunque la gran mayoría de bebés nacen completamente sanos, en el caso de que tener alguna sospecha se derivaría a un especialista para hacer un análisis más completo, iniciando el tratamiento lo antes posible si así se requiere.
Primeras pruebas del bebé recién nacido
Normalmente, cuando no ha habido ninguna complicación en el parto, la enfermera dará al bebé los primeros cuidados. Estos consisten en la limpieza de la boca y las fosas nasales del pequeño para que respire bien, limpieza de la piel y cubrirlo para que se sienta protegido.
Una de las primeras pruebas del bebé justo tras el nacimiento siempre ha sido el cachete para provocar el llanto y que el bebé comience a respirar por sí mismo. El bebé suele llorar por sí mismo al salir del cuerpo de su mamá, pero si no lo hace en un primer momento, ahora los médicos lo estimulan de una forma más suave, como por ejemplo moviéndoles los piececitos.
Acto seguido, se hará el corte del cordón umbilical para separar a la mamá del niño, justo antes de que se produzca la expulsión de la placenta por parte de la madre.
Además de estas pruebas sencillas y primeros procedimientos para asegurar la salud del bebé, hay otras más complejas que arrojan información vital sobre el estado del pequeño.
¿Qué pruebas se realizan a los recién nacidos?
Test de Apgar
El test de Apgar es una serie de revisiones y pruebas que se hace en el bebé nada más nacer y después de haber pasado unos minutos. De esta forma se comparan los valores, comprobando que el bebé sigue un ritmo de recuperación normal tras el parto.
Analiza que el color de la piel del bebé sea normal, la frecuencia cardiaca, su tono muscular, una correcta respiración y los reflejos primarios del recién nacido. Se realiza dos veces, la primera nada más nacer, y la segunda a los 5 minutos del nacimiento, cuando el bebé se ha estabilizado un poco.
A cada uno de los parámetros de estas primeras pruebas del bebé se le da una puntuación del 0 al 2, siendo 2 cuando la respuesta es correcta, 1 cuando es discreta y 0 cuando hay algún problema.
Si la suma de todos los valores se encuentra entre 8-10, el bebé estará perfecto, pero si es más baja de 6, se llevará al pequeño a vigilancia para prevenir posibles problemas, aunque no siempre derivan en problemas que el niño pueda sufrir en el futuro.
Lo normal es que los valores sean más bajos en la primera prueba, y que estos se normalicen en la segunda prueba.
Identificación
Justo después de hacer la primera parte el test de Apgar se realiza la identificación del bebé. Este paso es muy importante para mantener bajo control al pequeño en el hospital.
En la identificación del niño se toman las huellas dactilares y se le pone la pulsera de identificación del recién nacido con sus datos y los de la madre.
Medidas del recién nacido
Otra de las pruebas de atención al recién nacido en sala de parto es la medida del peso y de la talla. También se mide el perímetro de la cabeza para comprobar que su tamaño es normal.
Junto con estos procedimientos rutinarios se la determinación de grupo sanguíneo tomando una muestra de sangre del cordón umbilical. Con esta misma muestra se hace el análisis de gases y pH que indica el nivel de oxigenación del niño al nacer.
Aprovechando este momento en que la enfermera está con el bebé en sus manos, hará una primera revisión de la cabeza, la posición de la columna vertebral, las caderas, los genitales, en busca de posibles malformaciones a través de un examen físico completo del recién nacido.
La cura del ombligo se hace rápidamente, limpiando ligeramente al bebé y poniéndole su primer pañal y la ropa.
Una vez que el bebé está limpio calentito, se administra una inyección de vitamina K para prevenir hemorragias en el corte del cordón umbilical, y colirio en los ojos para prevenir una conjuntivitis, y así evitar profilaxis neonatal.
Estas pruebas se hacen rápidamente y de forma mecánica para que el bebé pueda estar cuanto antes con sus papás. En caso de que necesite algún tipo de atención, se puede llevar a la incubadora o a la unidad de neonatos para un control de su salud si esta no está al 100%.
Prueba del talón
Pasadas unas 48 horas desde el nacimiento del bebé, se hace la famosa prueba del talón. Esta es una de las primeras pruebas metabólicas y genéticas del bebé, que consiste en extraer una gota de sangre del talón, para medir ciertos parámetros y poder detectar más de 20 enfermedades metabólicas.
Entre estas enfermedades se puede saber si el bebé padece de hipotiroidismo, fenilcetonuria, fibrosis quística o hiperplasia. Estas enfermedades tratadas de manera precoz pueden asegurar una mejor calidad del vida del pequeño.
En algunos casos, si se detecta algún parámetro extraño, la prueba del talón se puede repetir pasados al menos 5 días. No te extrañes si el médico te llama para ello, es muy normal y se hace para asegurar el resultado en caso de que la primera no haya salido concluyente del todo.
Examen audiométrico
También a las 48 horas, cuando el bebé recién nacido ya se ha adaptado al nuevo medio, se realiza una prueba de su audición. Es una de las pruebas más novedosas, que emplea un pequeño aparato colocado en el oído que no molesta al bebé, para saber si tiene unos niveles de audición adecuados.
Si el bebé oye bien, la prueba será perfecta. En caso de que los niveles no salgan correctos, se puede repetir o hacer un diagnóstico para solucionar el problema auditivo del bebé, que en la mayoría de los casos fácil de tratar.
¿Qué pruebas se le hacen al recién nacido antes de salir del hospital?
Todos los informes obtenidos de las primeras pruebas del bebé quedarán registrados en la base de datos del hospital, y serán entregados en papel a los padres para que tengan a mano la documentación de su bebé. No te olvides de guardar cada documento del embarazo y del nacimiento de tu peque, para tenerlo como referencia en caso necesario.
Después de todas estas primeras pruebas del bebé, podrá descansar con su mamá, y pasará un largo tiempo hasta que la enfermera prosiga con las siguientes pruebas y las primeras vacunas antes de dejar el hospital. Hasta entonces, tocará disfrutar de los primeros momentos en familia con el niño, y del merecido descanso post parto.
Antes de dar el alta y poder salir del hospital, algunas de estas primeras pruebas del bebé pueden repetirse para su confirmación, administrándose la primera dosis de la vacuna de la hepatitis B, estrenando el calendario de vacunaciones que se entregará a los papás en ese preciso momento.