En la etapa de la primera infancia, la alimentación es crucial para proporcionar a los peques la energía y los nutrientes esenciales para su crecimiento y desarrollo. Sin embargo, muchos papás nos tenemos que enfrentar al hecho de que no todos coman como cabría esperar. ¿Cómo puedo conseguir que mi bebé tenga apetito si no le apetece comer?
Los bebés inapetentes son todo un reto para los padres y también para los pediatras. Sin saber a ciencia cierta el motivo, hay niños que no comen, que lo único que hace es solo dormir, o que directamente rechaza el pecho, el bibe o algunos tipos de alimentos.
¿Por qué mi bebé no quiere comer? Pueden ser muchos los motivos por los que ocurre este. Sin embargo, solo hay una vía posible: encontrar una alternativa para lograr que se alimente bien.
A través de esta guía para papás vamos a analizar las posibles causas por las que se produce la anorexia en bebé, o ausencia de ganas de comer, qué hacer en estos casos, y cómo lograr que el peque tenga apetito. Aplicable a lactantes y bebés mayores, toma nota de estos consejos y ponlos en práctica para lograr el objetivo de que tu hijo o hija se alimente bien.
¡Haz clic en lo que interese!
¿Por qué mi bebé no quiere comer?
El bebé puede llegar a rechazar el alimento por múltiples causas. Esto no quiere decir que se encuentre mal, o que haya una patología que deba preocuparnos. En la mayoría de las situaciones se trata de factores ambientales que son fáciles de tratar.
Entre los principales motivos por los que un bebé tiene falta de apetito y no quiere comer, destacamos los siguientes:
- Ya está saciado, y tiene cubiertas sus necesidades energéticas y nutricionales.
- Se encuentra en una etapa del desarrollo en la que las necesidades son menores, por lo que no precisa de tanta energía ni alimento.
- El bebé sufre estrés durante las comidas, y no se siente cómodo en ese momento.
- La técnica de alimentación no es la adecuada, y aunque tiene hambre, no le apetece comer.
- Se niega a probar nuevos alimentos, sobre todo en la etapa en la que comienza con la alimentación complementaria.
- La toma de ciertos fármacos y tratamientos puede reducir el apetito del bebé.
- Igualmente, algunas enfermedades provocan que no pueda comer ni dormir, que llore mucho y se sienta mal.
Por supuesto, hay otras muchas causas subyacentes que podrían darse según el entorno en el que se encuentre el bebé, y que habría que analizar para detectarlas y saber cómo actuar.
Anorexia en bebés
Cuando el bebé no tiene apetito, hay un término que se utiliza en pediatría y que suele hacer saltar las alarmas de los papás. Nos referimos a la anorexia en bebés, o la pérdida de la necesidad o del deseo de comer.
No te preocupes, aunque suene muy mal, la anorexia en bebés no tiene nada que ver con las causas que conocemos en los adultos. En los bebés no se trata de una afección o enfermedad psiquiátrica, y su tratamiento suele ser más sencillo.
La anorexia infantil se da cuando el bebé no tiene apetito, y se relaciona a las causas que ya hemos mencionado. En ocasiones es simplemente una etapa por la que pasan los pequeños, en momentos puntuales de la infancia cuando llega a un desarrollo lento en el que crece menos y no tiene por qué tomar tanto alimento.
No obstante, si la anorexia en bebés se prolonga demasiado, podría causar trastornos serios en la alimentación y el desarrollo. Lo más conveniente es consultarlo con el médico pediatra para poder hacer un correcto diagnóstico y tratamiento efectivo.
¿Qué hago para que mi bebé tenga apetito?
¿Sabía que hay momentos en los que el bebé puede tener menos hambre y rechaza habitualmente la comida? El tramo de edad varía en cada niño, pero suele coincidir con los 5-6 meses del lactante, a los 20 meses, a los 2 años de edad, y otras horquillas de edad que son más ‘problemáticas’.
Incluso cuando un bebé parece comer estupendamente, y se toma sin problema su puré o alimento sólido, puede presentar una regresión y de un día para otro rechazar la comida.
¿Qué hago para que tenga apetito y siga comiendo como siempre? Casi todos los padres y madres paramos por estos momentos de incertidumbre con la alimentación de los peques, que, por suerte, acaban pasando.
No te preocupes, teniendo alimentos a su alcance, ningún bebé sano va a morir de hambre. Solo tienes que poner en práctica estos tips y consejos para que coma mejor y tenga apetito en su día a día.
Alimentación variada
Ofrécele a tu bebé una alimentación lo más variada posible. Una vez que el lactante comience con la alimentación complementaria, además de la leche de fórmula o la lactancia materna, necesita todo tipo de alimentos que le aporten nutrientes y también nuevas experiencias sensoriales.
Prueba con diferentes sabores, texturas y olores. Los bebés necesitan experimentar, y al igual que nos pasa a los adultos, tendrán sus propias preferencias que irán cambiando y desarrollándose con el paso del tiempo.
Ambiente agradable para comer
Proporciona a tu bebé un ambiente en el que pueda comer cómodamente. Las comidas tienen que hacerse en un sitio relajado, con el bebé correctamente sentado, sin ruidos y sin distracciones.
No te olvides de seguir un horario de comidas que le sea práctico al peque y a sus cuidadores. El momento de alimentarse tiene que relacionarse con estos pequeños oasis de paz en los que disfrutar de la comida plenamente.
Comida apetitosa y atractiva
Presenta la comida de tu bebé de una forma que le resulte llamativa y apetitosa. Hay diferentes alternativas cuando parece que un alimento no le termina de gustar del todo. Puedes probar con purés, trozos enteros, alimentos hervidos, cocidos, horneados, o a la plancha. Siempre lo más saludables posible.
Presenta la comida de tu bebé en pequeñas porciones, sin llegar a llenar demasiado el plato. Es mejor que se quede con hambre y te pida repetir, que ponerle una cantidad muy abundante que luego no se vaya a comer. Empieza siempre ofreciéndole los alimentos que menos le gustan, para después darle los que le encantan y sabes que se los comerá fácilmente.
Permite que el bebé coma solo
Para muchas papás es muy engorroso y lento que el bebé coma solo. Pero es realmente importante que pase por esta etapa, ya que no solo se trata de alimentarse, si no también de tener una buena relación con la comida.
Si el bebé se presta a hacerlo, permítele que sea él quien sujete el biberón. Ofrécele la comida para que la tome él solo, cogiéndola con las manos o manejando la cuchara para llevársela a la boca. Esto hará que se relacione más estrechamente con los alimentos, y que le apetezca experimentar y probarlos.
Da ejemplo de alimentación sana
Por último, aunque no menos importante, los padres y adultos tenemos que se el mejor ejemplo para los niños. Si ellos ven lo mucho que disfrutamos de la comida, acabarán por hacerlo, incluso logrando que tenga apetito y coma más de lo que lo haría en un principio.
Siéntate para comer en familia todos juntos, pasando un rato divertido y agradable con tu bebé. Come lo mismo que le has servido, y demuéstrale cómo debe tomarlo y lo rico que está. Al final todos comeréis más sanos, y los platos os parecerán mucho más deliciosos.
¿Cómo sé si mi bebé se ha quedado con hambre?
La sensación de hambre y saciedad de los bebés se regula de manera automática, ya que su alimentación es básica para su supervivencia y desarrollo. Los peques tienden a comer cuando lo necesitan. Y si bien llegará un momento en que sepan qué alimentos le gustan más y cuáles le apetecen menos, por lo general, la alimentación a demanda es la más efectiva.
Si tu bebé está lleno, simplemente dejará de comer. Puedes insistirle un poquito más para que tome más leche o se llene con una o dos cucharadas, pero si ya no quiere comer más, no sirve de nada presionarle.
¿Y si tiene hambre? También te lo hará saber. El bebé insistirá en que quiere seguir comiendo si aún no ha llegado la sensación de saciedad. Cada uno puede demostrarlo de una forma distinta.
Puede que lo notes porque busca el pecho o el biberón con la boca, o porque directamente te lo pide con las manos y con sus primeros sonidos y palabras. La sensación de hambre es la que hace que tenga apetito y le animará a seguir comiendo. Una vez que esté lleno, no insistas si no quieres que acabe por desarrollar una aversión por la comida o por un tipo de alimento concreto.
Otros consejos de alimentación para bebés
¿Tienes muchas dudas sobre la alimentación del bebé? Descubre a través de El Blog de tu Bebé, otras muchas recomendaciones de los especialistas para adecuar la nutrición de tu peque. Echa un vistazo a estas publicaciones:
- 5 Recetas con verduras para niños que no quieren comer
- 6 Recetas de papillas para bebés muy nutritivas
- ¿Cuándo pueden empezar a tomar agua los bebés?
- Alimentos para evitar el estreñimiento en bebés
- Cómo controlar el consumo de azúcar en niños
Ahora que ya sabes cómo potenciar que tu bebé tenga apetito, y conseguir así que siga una dieta sana y equilibrada, ponte manos a la obra. La alimentación del bebé es la base de su crecimiento y desarrollo, y no debemos descuidarla en ningún momento.