A los más pequeños de la casa les encanta imitar todo lo que hacen los mayores. Si en el desayuno ellos ven que papá o mamá suele tomar café, ¡por supuesto que a ellos también les apetece! Pero, ¿realmente pueden tomarlo?
El café no solo tiene un sabor muy atractivo, que además se puede preparar con diferentes matices añadiendo azúcar, edulcorante, cacao, vainilla y otros aditivos deliciosos. Esta bebida contiene cafeína, que es la que nos mantiene despiertos a lo largo del día, además de otros nutrientes que son buenos para la salud.
Existe un gran problema en el caso de los niños. La cafeína tiene ciertas contraindicaciones, tanto para los mayores como para los peques. Pero sobre todo en el caso de los niños, la acción que tiene el consumo de cafeína es mucho más peligrosa.
¿Y qué hago si a mi hijo o hija le gusta el café y me pide tomarlo en todo momento? Con esta completa guía te contamos todo lo que debes saber sobre tomar café en la infancia, recomendaciones, a qué puedad empezar, y qué alternativas hay para ellos con similar sabor.
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¿Pueden los niños tomar café?
Hoy en día el consumo de cafeína se ha disparado en la sociedad. Este estimulante forma parte de nuestra vida diaria, y lo hemos normalizado tanto que ya personas de todas las edades lo toman, incluidos los niños.
Sin embargo, debemos ser conscientes de que los niños no deben tomar café. La cafeína no es recomendable en la edad infantil. En pequeñas cantidades, y tomándola solo de forma aislada no pasaría nada. Pero con el consumo constante, los daños en los pequeños serían importantes.
Los niños son más susceptibles que los adultos a los efectos de la cafeína en el cuerpo y el cerebro. Esta es responsable de nerviosismo, irritabilidad, taquicardia, palpitaciones, y dificultad para dormir o insomnio. A ellos les afecta con dosis muy bajas, incluso con un simple sorbo de café. ¡Imagínate si se toman una taza completa!
Aunque para ti, como adulto, el café sea bueno y necesario para mantenerte despierto, los niños no deben tomar café. Ni si quiera si están dormidos, muy cansados, o si crees que necesitan un chute de energía por la mañana o a media tarde. Es algo muy contraproducente.
Riesgos de tomar café en la infancia
El efecto que tiene el café en los niños es mucho mayor. Ellos lo notan a dosis más bajas de cafeína, y pueden llegar a perdurar hasta más de 6 horas. Cuanto más pequeños sean los niños, más peligro habrá.
Hay múltiples problemas relacionados con tomar café en la infancia, entre los que podemos destacar estos:
- Inquietud y taquicardia
- Nerviosismo y temblores
- Mal humor
- Malestar de estómago y nauseas
- Diarrea
- Deshidratación
- Dolores de cabeza
- Falta de concentración
- Insomnio
- Mala calidad de sueño por la noche
A esto hay que sumarle que el consumo frecuente de café podría ocasionar una dependencia a la cafeína. La adicción a esta bebida crea una necesidad de tomarla para mantenerse despierto y evitar el mal humor, de manera más acusada que en los adultos.
¿Pueden tomar café descafeinado?
El café descafeinado procede de granos de café a los que se les ha eliminado entre el 90 y el 97% de la cafeína total. Hay quien puede pensar que esta es una mejor alternativa para los niños. Y verdaderamente lo sería, pero igualmente contiene la sustancia estimulante.
La cafeína es bastante menor, pero está presente de todas formas. La recomendación general sería que tampoco se tomase a edades tempranas, aunque esto dependerá de las preferencias de los niños y sus familias.
Por lo general, el café sin cafeína o descafeinado no debe darse nunca a niños menores de 8 años. También podría ocasionar nerviosismo y problemas de insomnio, así que no es bueno para ellos.
En niños de 9 años en adelante, el consumo de este tipo de bebidas sería más o menos contraproducente. Puedes probar con una pequeña cantidad, y en el caso de que sea demasiado estimulante para tu peque, evitarlo hasta que sea mayor.
Otras bebidas con cafeína no recomendables para niños
¿Qué pasa con otras bebidas que tienen cafeína? El café no es la única que los niños tienen a su alcance, y hay veces que las demás pasan desapercibidas porque los padres no son conscientes de ello.
Entre las bebidas que debemos controlar en la infancia están los refrescos de cola, bebidas deportivas energizantes, bebidas con cacao puro, el té y otras bebidas con teína.
Igualmente hay que tener cuidado con ciertos alimentos a los que se les añade cafeína, como pueden ser yogures, caramelos, helados o barritas energéticas y otros productos deportivos. Es importante leer siempre la etiqueta de composición antes de ofrecerlas a los niños.
En estos casos habría que sumar todo el aporte de cafeína que tienen tanto las bebidas como los alimentos, que afectan a los niños. Incluso si no le dejas tomar café a tu peque, puede estar tomando estimulantes por otros medios.
¿A qué edad pueden empezar los niños a beber café?
El nivel de desarrollo físico y mental de cada niño puede ser diferente a cada edad. Por ello, no podemos generalizar a la hora de recomendar el comienzo de consumo de café. Son los padres quienes deben decidir el momento más adecuado para que tomar café sea seguro para ellos.
No obstante, a rasgos generales, las autoridades sanitarias recomiendan que los niños menores de 12 años eviten a toda costa cualquier consumo de cafeína. La cantidad de este estimulante tendría que ser de 0 mg antes de superar los 12 años.
En niños mayores de 13 años, y hasta los 18 años, el consumo de cafeína tendría que limitarse a 100 mg/día o menos. No debemos olvidar que en la infancia y la adolescencia el efecto es mayor que para los adultos.
Hay quien dice que el café es una droga, y para otros es necesario en su día a día. Todos debemos hacer un uso responsable de este, y no empezar demasiado joven a consumirlo con frecuencia.
Alternativas al café para niños
Si bien el café tiene un sabor amargo que no suele ir mucho con los gustos de los más pequeños, curiosamente hay algunos peques que se sienten atraídos por su sabor. Para estos niños que quieren tomar café porque lo disfrutan, hay algunas alternativas más sanas que pueden tomar.
Como ya hemos visto, el café descafeinado no debería tomarse antes de los 8 años de edad. A partir de esa edad, tanto niños como niñas pueden tomar un poquito mezclado con leche.
Los peques igualmente pueden disfrutar del café de cebada o la bebida de achicoria, que tiene un sabor similar a tostado, pero no contienen cafeína.
Para aquellos niños que sean amantes del té y las infusiones, una que no aporta teína y está muy rica es el té de rooibos. Tomándolo con leche podrán disfrutar del auténtico sabor, pero dejando a un lado los inconvenientes que tienen las bebidas energizantes y estimulantes.
Más recomendaciones para niños que debes conocer
El descanso nocturno de los niños es sumamente importante ya que en este momento es cuando se libera la hormona de crecimiento que afecta de forma positiva a su desarrollo. Descubre más recomendaciones para fomentar un correcto descanso en los niños a través de estas otras publicaciones de El Blog de tu Bebé:
- ¿Los niños pueden tomar coca cola?
- Cómo controlar el consumo de azúcar en niños
- Hábitos para que tu hijo disfrute de un sueño saludable
- Cómo afecta el cambio de hora a los niños
- ¿Cuánto tiempo de siesta es recomendable para un niño?
Ahora que ya sabes a qué edad puede tomar café un niño, y qué otras alternativas existen, no permitas que esta bebida interfiera en su sueño. La cafeína no es buena a ciertas edades, y es necesario controlarla antes de que se convierta en una verdadera adicción.
Hola,
no sólo el café, sino cocacolas y bebidas azúcaradas y carbonatadas..
Besos!
A. Moreno