¿Quieres aprender a inculcar en tu familia los mejores hábitos saludables para niños y adultos? Con esta sencilla pero completa guía lo tendrás mucho más fácil.
Educar a los niños desde edades tempranas es imprescindible, para que a medida que crezcan vayan implementando un estilo de vida más sano, que mantengan a lo largo de la vida adulta. Es aquí donde los padres podemos interferir antes de que sea demasiado tarde, con buenos ejemplos en casa.
Una buena alimentación, la práctica de ejercicio físico, la higiene diaria, disfrutar del tiempo libre, o tener relaciones saludables con los demás, son solo algunos ejemplos de hábitos de vida saludables. Te contamos todo lo que debes saber sobre ellos como padre.
Descubre las mejores técnicas y herramientas de educación infantil para promover hábitos saludables en los niños y adolescentes, mejorando la calidad de vida de los pequeños.
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¿Qué son los hábitos de vida saludables?
Los hábitos saludables son una serie de conductas adquiridas y aprendidas a lo largo de la vida, que se llevan a cabo en el día a día para promover el bienestar físico, mental y social. Gracias a estas costumbres es posible prevenir múltiples problemas de salud, que podrían aparecer de manera inmediata o en el futuro.
Un hábito es el resultado de una acción que repetimos frecuentemente hasta que se convierte en una costumbre. Cuando los hábitos sanos se aprenden en la infancia, es más sencillo inculcarlos en los niños, manteniéndolos por el resto de sus vidas.
Cuanto antes se acostumbren los niños a hacer estas buenas acciones para cuidarse a uno mismo, mejores serán sus previsiones futuras. Los hábitos saludables para niños son más o menos los mismos que para los adultos, y por ello los mayores podemos (y debemos) ser el mejor ejemplo.
¿A qué edad se recomienda empezar a establecer estos hábitos de la vida diaria? Lo más recomendable es hacerlo lo antes posible, desde que el niño es un bebé. Pero nunca es tarde para ponerse manos a la obra.
Consejos para promover los hábitos saludables en los niños
Es normal que los padres no sepamos exactamente cómo poner en práctica los hábitos saludables que necesitan los niños. Nadie nos lo ha explicado paso a paso. Pero con un poco de sentido común, y algo de ayuda, seguro que lo harás fenomenal.
Vamos a ver cuáles son los hábitos de vida más importantes, básicos en el aprendizaje de los más pequeños. Te proponemos ejemplos y actividades para promover hábitos saludables, adaptados a diferentes edades, desde infantil, primaria, hasta la pre-adolescencia.
Alimentación sana
El primero y más importante es inculcar una alimentación saludable. Los niños están en plena etapa de crecimiento y desarrollo, y además están mucho más receptivos a la hora de aprender a llevar una dieta que se adapte a sus necesidades a lo largo de las diferentes etapas de la vida.
Por ello los padres debemos asegurarnos de algunas pautas importantes:
- Establece horarios fijos para cada comida a lo largo del día, convirtiéndolos en una rutina para hacer en familia.
- Haz una planificación semanal con el menú que tomaréis, combinando todos los grupos de alimentos.
- Cubre las necesidades mínimas de 5 piezas de frutas y verduras al día.
- Acostumbra a los niños a hacer un buen desayuno, para que tengan energía suficiente durante sus clases por la mañana.
- Evita las comidas ricas en grasa, en azúcares, refrescos y platos precocinados en la medida de los posible.
- Educa a los niños con una buena alimentación, ofreciéndoles alternativas saludables y adaptándote a sus gustos con otras opciones que les agraden pero que sean igualmente sanas.
Hidratación
Otro de los ejemplos de hábitos para niños, del que no siempre nos acordamos, es de la hidratación. Los niños están creciendo, y para la formación de los diferentes tejidos es muy importante un correcto aporte de agua.
Acostumbra a los niños a que su principal fuente de hidratación sea el agua mineral natural. Evita los refrescos, zumos, bebidas carbonatadas, azucaradas y otros derivados menos saludables.
Los niños tienen que beber alrededor de 1,5 a 2 L de agua cada día, repartiéndola por la mañana y por la tarde para ir rehidratándose poco a poco. Llevar una botella de agua siempre encima es muy práctico para esos momentos en casa, de paseo, de viaje, y también en la escuela.
Higiene
La higiene es otro de los hábitos de vida sana que precisan de cierta instrucción para los niños. Los padres somos los responsables de la higiene de los niños mientras aún no pueden hacerlo por ellos mismos. Pero a medida que crecen y tienen mayor autonomía, deja que lo hagan por su cuenta para que aprendan.
Estas pautas son esenciales para las familias:
- Lavarse las manos con frecuencia, ya que es habitual que los niños se lleven las manitas a la boca.
- Enseñar a los niños la importancia de limpiarse correctamente tras ir al baño.
- Asegurar una correcta higiene bucodental, enseñando la técnica del cepillado.
- Establecer una rutina de ducha, permitiendo que el niño se enjabone por su cuenta, incluidas las partes íntimas.
- Cuadrar las rutinas de lavado de cabello a la semana, para mantener una higiene completa.
- Enseñar la importancia de mantener limpia la ropa, cambiar la ropa interior, y por supuesto, lavar cada prenda.
Sueño y descanso
A la hora de fomentar los hábitos de vida saludable, los niños tienen que aprender que el descanso forma parte de la salud de todo el cuerpo. Sobre todo en la infancia, el crecimiento y desarrollo de los peques se produce por la noche, ya que mientras duermen liberan la hormona del sueño.
Un niño que aprende a dormir bien, a relajarse y obtener un descanso físico y mental adecuado, será un adulto con una mejor higiene del sueño.
Estas pautas te vendrán muy bien para que los niños y adolescentes aprendan a dormir y descansar correctamente:
- Establece un horario para ir a la cama y para levantarse cada día, de manera que los niños duerman el tiempo suficiente para su edad.
- Combínalo con un horario de siesta en caso necesario.
- A la hora de ir a dormir, recrea un ambiente tranquilo y sosegado.
- Evita que los niños coman mucho o beba antes de irse a la cama, para que no haya despertares nocturnos.
- Sigue una rutina divertida de relajación, como leer un libro, contar un cuento, cantar una canción de cuna, para que el peque se vaya tranquilo a la cama y pueda descansar mejor.
Ejercicio físico
Tan importante como dormir bien y aportar los nutrientes necesarios para el cuerpo a través de la dieta, es hacer ejercicio físico. Los niños de hoy en día tienen mayor tendencia al sedentarismo, y esto es algo que le afectará también en el futuro.
Es importante establecer el gusto por el ejercicio físico desde que los niños son pequeños. Encuentra alguna actividad que le resulte entretenida, o haz planes divertidos en familia todos juntos.
¿Cómo puedes fomentar el deporte para que tus hijos lo practiquen a diario? Sigue estas recomendaciones:
- Asegúrate de que tu hijo practique al menos 1 hora de deporte al día.
- Evita los periodos de inactividad.
- Limita el tiempo que pasa frente a las pantallas, como la tablet, el ordenador o la televisión.
- Haz ejercicio físico en familia, ya que es beneficioso para todos.
- Busca actividades alternativas para que aprenda más sobre otros deportes.
Los seres humanos somos seres sociables, y necesitamos relacionarnos con los demás. Fuera del ámbito familiar, los niños empiezan a tener relaciones con los compañeros de clase y otros niños de su edad. Es importante que los niños desarrollen relaciones sanas, aprendiendo valores como el respeto o la solidaridad.
Gracias a las relaciones sociales, los niños y niñas aprenden que hay que compartir, a respetar el medio ambiente, a ser cuidadosos y ordenados con sus propias cosas y con las de los demás, y otros valores.
Puedes encontrar más recomendaciones para promover un buen comportamiento social en los niños a través de estas entradas de El Blog de tu Bebé:
- 12 Normas de clase y de convivencia en el aula
- Cómo ayudar al niño a reconocer las malas influencias
- Cómo fomentar el compañerismo en el aula
- Tips para mejorar la relación con los hijos
- Cómo mejorar el optimismo en los niños
Pero sin duda, lo mejor para potenciar el desarrollo de hábitos saludables en los niños es ser el mejor ejemplo para ellos. Los niños reflejan su comportamiento sobre lo que ven en los padres, hermanos mayores, tutores y profesores, hasta convertirse en las personas que serán en la etapa adulta.
Tomando como referencia estos ejemplos de hábitos saludables, tú también puedes elegir qué valores inculcar a tus peques, y hacer un trabajo educativo impecable para que disfruten de la mejor salud física, mental y social.